Este lunes arrancaba la nueva serie de paros convocada por parte de la mesa negociadora -CGT, ELA, LAB y ESK- del nuevo convenio de Michelin. Ya a primera hora de la mañana se preveía que el seguimiento de estas iba a ser masivo, ya que los sindicatos cifraban en un 93% la participación en la primera huelga, previsión que se podía constatar esta tarde cuando miles de personas han recorrido las calles de la capital alavesa en rechazo a las últimas propuestas de la compañía.
Al grito de ‘IPC sin trampas’, miles de personas han partido de la plaza Bilbao, de la capital vasca, hasta la plaza de la Virgen Blanca porque, tal y como ha explicado Jon Coroso, representante de CGT Michelin, “la propuesta que hay encima de la mesa es completamente insuficiente. Es cierto que se ha ido ajustando poco a poco pero seguimos perdiendo poder adquisitivo y no hay ninguna reducción de jornada”.
Y es que, dicha propuesta pasaba, según comunicaron los sindicatos, por ampliar anteriores ofertas y comprometerse a un incremento inicial del salario anual y de los pluses de sistema o noche del 12%, fraccionado en un 5% el primer año, 3% el segundo y 2% los dos últimos. A ello, se le sumaba una cláusula de garantía salarial consolidable y calculada cada dos años, al IPC real hasta un máximo de 2%; mientras que los sindicatos, por su parte, piden una subida del 17% vinculada al IPC. Se centran, así, en la garantía salarial “que esté ajustada al IPC real y en la reducción de jornada, ya que en los últimos convenios nos han ampliado la jornada y queremos que se reduzca”, ha matizado Coroso.
Respecto a las primeras horas de los paros en la factoría de este lunes, Coroso ha añadido: “Estamos muy satisfechos. A la mañana ha habido más de un 90% de seguimiento y a la tarde todavía más. La planta está parada porque han sido pocos los trabajadores, 40 o 50 personas en toda la fábrica, que han entrado y no han podido arrancar”. Y ha asegurado: “El siguiente paso será el día 7, con una nueva jornada de huelga y el día 9 hay una nueva reunión de negociación en la que habrá un posicionamiento de la parte social, que imaginamos que será negativo. Así que estamos a la espera para ver qué pasó da la empresa”.
Foco de conflicto entre sindicatos
Las movilizaciones están siendo secundadas por un buen número de trabajadores, a pesar de que los cuatro sindicatos convocantes son minoría dentro de los delegados sindicales de Michelin Vitoria (12 de los 27 que completan los sindicatos CCOO, UGT, CSIF y CCM). Así el propio comité de empresa se ha desvinculado de las mismas, al "no respaldar las convocatorias" y rechazado la premura que tuvieron dichos sindicatos para movilizar a parte de la plantilla.
Según Octavio Álvaro, portavoz y responsable de CCOO, esta parte sindical “no ha respetado los tiempos para la reflexión acordados en la mesa y han incumplido su palabra de comprometerse a una respuesta global con el resto de la parte sindical”, un movimiento que, a su parecer, “va a condicionar el resto de la negociación en caso de que nuestros afiliados rechacen la última propuesta de Michelin”.
A estas palabras, Coroso ha contestado: “Tuvimos reunión con CCOO el pasado viernes y hoy estaban invitados a venir. Para mí estas huelgas no empañan nada. Aquí hay trabajadores de todos los colores, de todos los sindicatos, que precisamente nos están dando una lección de unidad a todos los sindicatos”.
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