ArcelorMittal asegura el suministro renovable hasta 2032 para relanzar Sestao y Olaberria

ArcelorMittal va colocando las piezas del puzzle que, una vez completo, dará lugar a un nuevo sistema productivo en España anclado al hidrógeno. Un ecosistema que de salida revaloriza las dos instalaciones eléctricas actuales del grupo, ambas ubicadas en Euskadi: Sestao y Olaberria. Dos acerías muy castigadas por los altos precios de la luz en los últimos tiempos pero que verán reforzado su papel de la mano del nuevo rol de las renovables.

Tanto la planta vizcaína como la guipuzcoana están acostumbradas a la dieta más estricta. En los cuarteles generales de la multinacional en Asturias lo normal hasta ahora era vigilar con lupa cualquier desvío en la factura eléctrica con el pie colocado sobre el pedal de freno. Tras varios años con parones intermitentes, solo en 2023 las dos acerías han recuperado ritmo gracias a la moderación de los precios de la energía, eso sí con sendos ERTE sobre la mesa que recuerdan que aun queda mucho camino hasta volver al pleno rendimiento.

Todo apunta a que 2023 puede ser el punto de inflexión, la ciaboga que permita a ambas acerías dar un salto de calidad en el escalafón del grupo en el sur de Europa gracias precisamente a sus hornos eléctricos. La demanda de acero verde, fabricado con un nivel bajo de emisiones, es cada vez mayor y el gigante siderúrgico necesita que estas dos piezas funcionen. De hecho ha sido el propio mercado el que ha empujado para dar continuidad a la ACB de Sestao este año, mientras que Olaberria y Bergara (componen un mismo centro productivo) tienen también importantes pedidos de perfiles bajos en emisiones.

El nuevo entramado productivo estará listo a partir de 2025, cuando entrará en funcionamiento la nueva planta de reducción de hierro con hidrógeno en Gijón. Las instalaciones asturianas seguirán siendo el corazón del grupo y, gracias en parte a los 450 millones de euros de los fondos europeos, contarán para entonces con una nueva acería eléctrica. Un camino que ya tienen recorrido Sestao y Olaberria y que es hoy en día un aval para poder competir en el mercado del acero verde.

Instalaciones de ArcelorMittal en Gijón

PPA con Shell

En ese sentido la multinacional no quiere sustos en lo que al suministro eléctrico se refiere, más aun teniendo que garantizar el origen renovable de esta energía para que todo el plan cobre sentido. Ya hay experiencia con los altibajos en los precios y 2025 no está tan lejos. ArcelorMittal tiene ya firmado un primer PPA (contrato de compraventa a largo plazo) con el gigante energético Shell por el que la británica suministrará energía limpia entre 2025 y 2032 a sus plantas españolas.

Este tipo de acuerdos, habituales en el mundo siderúrgico aunque en este caso destaca la duración del mismo, dan estabilidad y permiten hacer números con un coste fijo y conocido. Además, a modo de transición, este año y en 2024 Shell suministra energía de origen renovable suficiente para asegurar la fabricación de los productos que llevan la etiqueta XCarb, que son los que Arcelor comercializa como aceros con huella de carbono muy baja (materia prima reciclada, además de energía renovable) y que salen de acerías eléctricas como Sestao y Olaberria.

ArcelorMittal Olaberria. / EFE

Perfiles para Barrett Steel

Si bien la ACB es la que sale mejor parada del plan de descarbonización del grupo, que contempla que la acería de Sestao sea la primera del mundo con cero emisiones netas, también las instalaciones guipuzcoanas están viendo reforzado su papel. Bergara y Olaberria han sido parte del macropedido de perfiles de Barrett Steel, uno de los líderes del sector, para la ampliación de sus instalaciones.

La acería guipuzcoana está capacitada para la fabricación de perfiles XCarb, con cada vez mayor demanda, y en este caso ha sido proveedora de 650 toneladas de perfiles de acero para la compañía de Reino Unido junto a las plantas de ArcelorMittal en Belval y Differdange, en Luxemburgo. Además, desde la ACB, proveedora de firmas como Gestamp o Arania, se ha entregado un pedido de más de cien toneladas de bobinas XCarb a la guipuzcoana Hijos de Juan de Garay, compañía de equipos industriales de Oñati.

En cuanto a la otra planta de Euskadi, la de Etxebarri, dedicada a la fabricación de chapa para sectores como alimentación, recibió el año pasado la certificación de producción responsable (ResponsibleSteel) junto al resto del llamado Clúster de Asturias que integra también a Lesaka y Sagunto.