Michelin reduce su producción y los sindicatos apuntan al conflicto laboral

Cuatro meses después de la firma del convenio de Michelin, firma que supuso el final de un conflicto que duró meses y que afectó a los más de 3.000 trabajadores que forman parte de la segunda fábrica más numerosa de Euskadi -solo por detrás de Mercedes- parece que las aguas no se han calmado en la fabricante de neumáticos alavesa. Y es que este martes la dirección de la compañía comunicaba al comité que se dejarán de producir ruedas durante todos los fines de semana, desde este -7 y 8 de octubre- hasta el puente de la Constitución de diciembre. 

Esta decisión supondrá para la factoría dejar de producir 2.000 toneladas de ruedas de ingeniería civil y afectará a unos 1.350 trabajadores. Detrás de esta, según David Martinez Marigorta, de la sección sindical de ELA en Michelin, estaría el objetivo de “amedrentar” a la plantilla que esta misma semana celebra una de las dos jornadas en las que se votará la salida de la fábrica alavesa del comité intercentros. 

Así, y si bien Martínez Marigorta reconoce que existe una bajada de pedidos que se ha sucedido durante todo el año -razón que ha aportado la dirección para tomar esta decisión-, insiste en que estas se han espaciado en la producción de la fábrica con la intención de que no afectase a los trabajadores, algo que no coincide con la medida adoptada este martes. “En vísperas de este referéndum, choca tener estas paradas de producción cada fin de semana durante tres meses seguidos. No es normal que se haga tan seguido y creo que se hace con el fin de amedrentar a los trabajadores”, explica. 

La dirección de Michelin, aseguraba a EFE por su parte, que estos recortes estarían directamente relacionados con una menor demanda de pedidos de este tipo de ruedas a lo largo de todo este año, con "volúmenes menores de lo previsto a finales de 2022". Aunque no descartaba la influencia del conflicto laboral en esta decisión. Y por eso, insistía: “Michelin aboga por un sistema de trabajo con la persona en el centro y en el que se prioriza el compromiso de los trabajadores, y una fábrica que no apueste por ese modelo pierde la confianza.

Trabajadora de Michelin. / Michelin

¿Salida de intercentros?

La votación del convenio en junio podría servir de preámbulo de lo que puede pasar en este próximo referéndum. Y es que si bien hace cuatro meses se llegó a un acuerdo, no fue precisamente por los votos emitidos en la fábrica vasca, donde se impuso el 'no al convenio' con un amplio margen, casi el doble de votos en contra (2.007) frente a las papeletas favorables (1.093).

Sin embargo, el sistema de negociación del convenio, sistema que desde sindicatos como ELA y LAB se ha intentado cambiar en numerosas ocasiones, ampara a esta planta y a las de Valladolid y Aranda de Duero, por lo que entre estas sumarían casi 7.000 votos. Por eso en junio, y pese a los más de 2.000 votos en contra de la firma del acuerdo, se impuso el ‘sí’ con la apuesta clara de las otras dos factorías, a las que se sumó una pequeña fábrica en Almería, con lo que el resultado quedó en unos 3.300 votos a favor de la oferta empresarial frente a 2.500 en contra.

“En Vitoria las aguas todavía no están calmadas porque no se han cumplido las expectativas que teníamos. Por eso convocamos este referéndum y, aunque es imposible saber qué decidirán los trabajadores, preveo que la opinión puede ser parecida a la votación del convenio. Aunque eso sí, con menos participación, porque una vez cerrado el convenio y hasta 2026 no va a ser notable formar parte de intercentros”, concluye.