El instrumento inversor de la familia Delclaux, Tekpolio, trabaja en una oferta de compra para reflotar la empresa de piezas de automoción Microdeco. En situación concursal, la compañía de Ermua necesita un nuevo socio que dé respaldo económico y tiene ante sí una buena oportunidad de salir adelante a través de un fondo de plenas garantías y en fase de expansión.
De hecho Tekpolio acumula varias adquisiciones en los últimos tiempos, sin ir más lejos hace un año absorbía la catalana Deale, una especie de plataforma para poner en contacto a empresas e inversores. De marcado perfil tecnológico, el 'family office' de los Delclaux-Lezama Leguizamón ha comprado recientemente Irontec incluso ha hecho incursiones en el mundo del hidrógeno con una inversión de 8 millones en la fábrica de electrolizadores de H2B2 en Sevilla.
Desde la propia Tekpolio vienen insistiendo en su objetivo de seguir ganando tamaño con nuevas inversiones, especialmente en sectores innovadores. En el caso de Microdeco, pese a tratarse de una actividad de corte más tradicional como la automoción, sucede que la compañía siempre ha destacado por su potencial tecnológico a nivel de maquinaria (se fabrican piezas de pequeño tamaño y alta precisión) a lo que se suma la reputación cosechada por la marca en el mercado.
Según ha podido saber Crónica Vasca, los gestores del vehículo inversor de la saga de empresarios vascos propietarios de Vidrala llevarían tiempo trabajando en una oferta de compra para hacerse con los activos de la compañía con cuartel general en Ermua y plantas productivas en México y Rumanía.
Huelga indefinida
Microdeco, fundada en 1963 y que cuenta con clientes consolidados en Europa, Turquía, China, India, México y Estados Unidos, entró en concurso de acreedores en 2021 con una deuda de 20 millones de euros. Las medidas tomadas por la administración concursal para adelgazar el gasto y lograr un acuerdo con los acreedores han dejado la plantilla actual en algo menos de un centenar de trabajadores mientras se sigue a la espera de poder concretar un nuevo socio que se haga cargo de un proyecto que, ya con la situación financiera menos urgente, sigue siendo muy atractivo, indican fuentes conocedoras de la negociación.
El proceso para la entrada de Tekpolio estaría avanzado, aunque las experiencias anteriores fuerzan a no dar por sentada la operación. Más aun cuando desde el comité que encabeza ELA se ha planteado retomar las movilizaciones la semana que viene en forma de huelga indefinida en protesta por la petición de un nuevo ajuste de plantilla. Como siempre en estos casos, el entendimiento con la parte social es vital para la llegada de un nuevo inversor.
ELA denuncia que hace dos años la compañía contaba con 160 trabajadores y, tras el nuevo ERE, se pretende dejar en 52. "En el ERE han incluido a todas las trabajadores mujeres de producción, siendo esto un elemento absolutamente discriminatorio", dice el sindicato.