Si ya en el mes de julio Euskadi se colaba entre las regiones de alta innovación en el ránking europeo elaborado por la Comisión Europea, ahora, el País Vasco, cuenta con el mayor porcentaje de empresas innovadoras de toda España en los dos últimos años y es la tercera comunidad con mayor gasto en actividades innovadoras en 2022. Incorporar novedades es imprescindible para las empresas si quieren crecer y mantener su actividad en el tiempo.
Según la 'Encuesta de Innovación en las Empresas' realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el 29,8% de las empresas vascas —de diez o más asalariados— fueron innovadoras de producto o en sus procesos de negocio, lo que hace que la Comunidad Autónoma Vasca sea aquella con más empresas de este perfil entre 2020 y 2022 y supere en casi seis puntos a la media nacional. Por detrás, quedan Cataluña (29,3%) y Navarra (26,1%).
Por otro lado, en lo que a inversión se refiere, Euskadi gastó 1.900 millones de euros en actividades innovadoras a lo largo del pasado año, lo que supone el 9,1% del total de esta materia. Por delante, solo se encuentran Madrid (6.289 millones) y Cataluña (5.452 millones), mientras que el gasto en el conjunto de España fue de 20.836 millones de euros.
Basquevolt, IBM o Saitec
La inversión empresarial en investigación, la venta de nuevos productos o el capital humano altamente cualificado son algunas de las fortalezas que convierten a Euskadi en una región de "alta innovación", superando incluso a la media europea. Casos como el de Basquevolt, el ordenador cuántico de IBM o proyectos pioneros como el molino flotante de Saitec.
Entre los sectores empresariales más intensivos en I+D, a la cabeza se encuentra la industria siderometalúrgica y bienes de equipo (18,26%), en segundo lugar, la de transporte (15,92%) y en tercera posición, la electrónica y servicios TIC (12,90%). El personal en I+D dedicado a este tipo de actividades en el mercado laboral también ha ido aumentando a lo largo de los últimos años. A fecha de 2021, casi un 2% —1,99% concretamente— sobre la población activa era personal en I+D, un porcentaje que queda lejos del de la media europea (1,49%) y, más aún, del de la media española (1,09%).
Desde el Gobierno vasco tratan de impulsar esta actividad con la creación en 2007, por ejemplo, de Innobasque, la Agencia Vasca de Innovación. "Aumentar el número de pymes que innovan y el volumen de inversiones empresariales en I+D son los principales retos que afrontar si queremos formar parte de los territorios que lideran la innovación europea", señala Innobasque en su página web.