ABB acaba de presentar una nueva generación de convertidores eólicos de media tensión y alta potencia en WindEurope, el encuentro de la industria europea que acaba de celebrarse en el BEC, de los que ya ha suministrado cientos de unidades para los actuales aerogeneradores marinos de gran escala. Además, la multinacional con sede central en Suiza acaba de lanzar una gama de condensadores síncronos que contribuirán a dotar de estabilidad a la red eléctrica. De estas novedades y del futuro y posibilidades del sector eólico, tanto offshore como onshore, nos habla Juan Bachiller, director general de ABB Motion en España.
-Ya es la tercera vez que WindEurope se celebra aquí en Euskadi. ¿Cree que nuestro territorio es referente en el sector eólico?
-Una de las cosas buenas del País Vasco es que ha sido capaz de generar y concentrar mucho conocimiento. Ha generado esos campeones nacionales, como Iberdrola, con sede aquí; Siemens Gamesa, que también tiene una parte importante de desarrollo aquí; Ingeteam; o nosotros, ABB, que también tenemos una presencia industrial fuerte con dos fábricas en Euskadi: una en Oiartzun para equipos de luz y componentes electrónicos; y otra en Trapagaran-Valle de Trápaga, donde tenemos una fábrica de generadores para distintas aplicaciones. Creemos que el País Vasco se trata de una localización muy sólida, también desde el punto de vista del talento, con muy buenos profesionales y capaz de generar esa industria auxiliar alrededor que apoya el desarrollo.
-¿Y a nivel marino? ¿Existen más limitaciones y condicionantes que en otros lugares?
-Al final, en otros países como Escocia o Reino Unido, con el Mar del Norte, donde los fondos marinos son menos profundos, ha sido más fácil desarrollar esa tecnología, por eso tienen esos grandes parques que se conectan a las costas de Alemania o Bélgica. Pero por otro lado, yo creo que esa dificultad para abordar esas nuevas tecnologías poco a poco se va consiguiendo y creo que va a venir también al resto de los países, incluyendo España, por lo que hay planes de avanzar.
-Claro, casi es un reto técnico. Pero la necesidad se convierte en virtud, ya que de ahí pueden salir las innovaciones necesarias.
-Es importante que en este sector nos vayamos adaptando, ya que al principio eran temas muy experimentales, pero ahora es una industria muy madura, muy sólida y de mucho futuro. ABB tiene más de 120 años y en España llevamos desde 1917. Es una empresa líder en tecnología aplicada al ámbito industrial y hemos ido acompañando el desarrollo industrial. En el caso concreto de España, desde las refinerías hasta la industria pesada.
-¿Cuándo comenzó ABB a apostar por las energías renovables?
-ABB es acrónimo de Asea Brown Boveri, que como su nombre indica fue el resultado de la fusión empresarial, en 1988, de la empresa sueca Asea y del grupo suizo 'Brown, Boveri & Cie (BBC)', industria suiza que había adquirido previamente a Maschinenfabrik Oerlikon en 1967. Y Brown y Bovery eran dos señores con dos apellidos que estuvieron en el nacimiento de la electricidad. Y luego, cuando llegó el momento de arrancar con las energías renovables, también nos hicimos partícipes y evolucionamos hacia ese sector. De hecho, ABB fue uno de los pioneros en el desarrollo de los motores, de los generadores, y también de los convertidores de frecuencia. Aportábamos nuestra experiencia en el sector industrial y hemos sido partner de la mayor parte de las empresas desde el principio.
-¿Siempre haciendo especial hincapié en la energía eólica?
Sí. En la eólica terrestre y también en la marina.Nosotros hemos sido uno de los grandes fabricantes que ha acompañado ese crecimiento de la eólica en España desde el principio, como decía, como consecuencia de que en España hubo muchas empresas que pusieron fábricas para producir esos componentes del corazón de los aerogeneradores. Tenemos una gran masa instalada en España y fuera de España, y lo que hacemos es que no solo suministramos, sino que acompañamos a los clientes durante toda la vida útil de estos equipos.
-¿Y cuál es la vida útil de estos equipos?
-Las turbinas, en estos momentos, tienen una edad en torno a los 15-20 años de valor medio, pero ya hay tendencias en el sector para alargar la vida para que esos equipos, que están en las mejores ubicaciones de viento, sean más productivos durante más años, y en ese sentido, hay una apuesta clara por la circularidad y por la sostenibilidad.
-¿Qué porcentaje de los beneficios de ABB se corresponden con el negocio eólico?
-ABB es una compañía que está en torno a los 30 billones de facturación anual y una parte del negocio está relacionado con la eólica, pero no es fácil saber exactamente cuánto, ya que prestamos servicios para distintos componentes, de modo que es difícil encontrar una turbina eólica donde no haya un componente de ABB dentro. Y aunque no es nuestra actividad principal, sí es creciente.
-¿Y qué crecimiento estiman en esta área?
-Lo que nosotros queremos es crecer por encima del mercado, que según los estudios, crecerá un 8% de media en relación a la tecnología asociada durante los próximos años. Hay países como China, donde se prevé un gran crecimiento, y estamos también ahí, pero claramente vemos que en Europa también es posible el crecimiento.
-Europa está tratando de incentivar las renovables a través de una legislación que apoye la transición energética.
-Sí. Existen incentivos para poder llevar a cabo esa transición energética, ya que las energías renovables nos generan cierta autonomía estratégica, teniendo en cuenta que el recurso, tanto el solar como eólico, es local y en principio inagotable, con lo cual, al final te ayuda a no depender, por ejemplo, de los combustibles fósiles. Además, es una energía cada vez más fiable y competitiva como consecuencia de las mejoras tecnológicas en la capacidad de predicción que hay.
-En WindEurope acaban de presentar una nueva tecnología para convertidores de media tensión que puede resultar muy útil para los aerogeneradores marinos.
-Sí, presentamos esta tecnología de los convertidores, que son, conjuntamente con los generadores, el corazón y el músculo de las turbinas eólicas. Estos nuevos equipos de media tensión, dirigidos a los aerogeneradores offshore, lo que permiten es incrementar el rango de potencias que podemos ofrecer a nuestros clientes.
-¿Y qué puede suponer este avance técnico llevado a una instalación eólica marina?
-Hay sólo 23 fabricantes a nivel mundial en este tipo de tecnología y el hecho de que podamos incrementar la potencia hasta entre 20 megavatios, que es un 33% más de lo que tenemos hasta la fecha, pues va a ayudar a que estas grandes empresas fabricantes de turbinas en el sector eólico marino, como Iberdrola, Acciona, Enel o Siemens Gamesa, puedan incorporar esto para hacerlas un poco más grandes y más eficientes, con lo cual estamos ayudando a ese crecimiento.
-¿En qué otras áreas se emplean estos convertidores?
-Una de las ventajas de esta tecnología de convertidores es que los estamos aplicando ya en el sector industrial, donde no hay esas limitaciones de tamaño. Entonces tenemos una larga experiencia en aplicaciones en el sector industrial, en las grandes acerías o en plantas de papel, donde utilizamos tecnología similar, y eso nos permite que ahora, cuando vamos al sector eólico, al eólico marino, donde necesitamos también ese rango alto de potencias, pues ya tengamos una experiencia previa.
-¿Qué retos presenta a día de hoy la industria eólica marina?
-La eólica marina presenta retos técnicos como consecuencia de que son unos equipos que están ubicados en el mar, con lo cual hay vibraciones, contaminación salina y otros factores del medio marino, pero la tecnología y la experiencia la tenemos, así que creemos que ABB va a ser una empresa bien posicionada cuando lleguen las oportunidades.
Pero además de estar en la parte de la producción, también ayudamos a integrar esa energía en la propia red. Es decir, además de fabricar los equipos que están dentro de las turbinas, como consecuencia del incremento de las energías renovables en la red, es necesario dar soluciones para la estabilización de la propia red y, por eso, estamos aportando soluciones técnicas, como los condensadores síncronos que acabamos de presentar también en este congreso, y que muchas empresas están ya incluyendo en sus ofertas para cumplir con los pliegos, que exigen un punto de conexión que aporte estabilidad de la red.
Relacionado con esto, otro de los retos que tenemos por delante es cómo hacemos para gestionar esa generación de energía y que no se pierda. Por un lado, con sistemas de hibridación, combinando energía solar con energía eólica, por ejemplo, y por otro, almacenándola a través de baterías o mediante la generación de hidrógeno verde a partir de esas energías renovables que debemos integrar en la red a través de convertidores de frecuencia.
-Por último, nos toca muy de cerca el caso de Gamesa, que está atravesando problemas técnicos que están afectando a toda la cadena de suministro. ¿Creen que se solucionará pronto?
-Confiamos mucho en la capacidad de Siemens Gamesa. Es un jugador que ha estado en el mercado liderando muchos temas desde hace muchos años y, claramente, como anunció el año pasado, comunicó sus problemas técnicos, pero creo que tienen capacidad tecnológica para resolverlos y para salir adelante sin ningún tipo de problema. Es uno de nuestros partners y lo seguirá siendo. Durante muchos años Siemens Gamesa compró equipos de ABB, tanto convertidores como generadores, como también equipos de baja tensión y en sus contratos de servicios a clientes cuyos equipos son de ABB cuentan con nosotros y nosotros les damos ese apoyo.