Todo parecía indicar que el inicio de la producción de los nuevos modelos de la Vito iba a suponer una reactivación del empleo en la planta de Mercedes Vitoria, pero al parecer la llegada de estas nuevas furgonetas no ha tenido consecuencias en la fábrica en la que trabajan 5.000 personas. 

Este jueves la dirección de la planta ha anunciado a su plantilla cuatro nuevas jornadas de paro, repartidas a lo largo del verano, que se sumarán a los treinta turnos desactivados a lo largo del primer semestre de este año: tres días en febrero, otros tres en marzo, trece días entre finales de abril y mayo, cuatro días ese mismo mes, y los últimos anunciados: cuatro días de parada en junio -7,14,21 y 24- y otros tres en julio -del 22 al 24-. 

Según el anuncio de la fábrica vasca, dirigida por Bernd Krottmayer, a estos se añaden paradas en su producción el 15 de julio, 30 de agosto y 6 y 13 de septiembre, según apuntan, "por la caída de la demanda de furgonetas". Algo que llevaban sufriendo desde principio de año pero que, sin embargo, esperaban revertir, llegando incluso, tal y como apuntaban desde ELA -sindicato mayoritario- a conseguir cifras similares a las del año pasado, año récord en la planta alavesa con la producción de 160.000 furgonetas. 

Así, la suspensión de la producción afectará al turno de mañana del lunes 15 de julio, mientras que en las otras tres jornadas, entre agosto y septiembre, se verán afectados los tres turnos, en los sectores de Montaje Bruto, Pintura y Montaje Final. Turnos que correrán a cargo de la bolsa de flexibilidad implantada en la factoría, por lo que en un principio no tendrá mayor consecuencia para los trabajadores. 

Mercedes

Esperanza en los nuevos modelos

Los primeros meses de este año no han sido fáciles para la fábrica vasca, dirigida por Bernd Krottmayer, que ha llegado a acumular casi un mes de desactivaciones; sin embargo, las perspectivas de los trabajadores, tal y como apuntaban fuentes sindicales, eran buenas pues depositaban la esperanza, en el arranque de producción del nuevo modelo de la Vito y eVito, que, en un principio, iniciaría en julio

Ya en su momento, fuentes sindicales admitían que precisamente este mes “por las vacaciones y por las obras de ampliación de la planta” iba a ser una temporada complicada para lograr los objetivos marcados en la producción de estos modelos -quieren llegar a las 3.500 unidades por semana, “como hacíamos antes-, pero confirmaban que con los nuevos pedidos la productividad se dispararía y “remontararía”. La situación ahora dista del contexto esperado y dibujado por los sindicatos, pero habrá que ver si finalmente la nueva producción permite a la factoría vasca encarar el segundo semestre del año con mejores perspectivas. 

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