Arrancan los JJOO de París: las empresas vascas no consiguen mínima olímpica

El mundo se detendrá por un momento este 26 de julio en París. La capital francesa se convertirá en el epicentro mundial del deporte con el inicio de unos Juegos Olímpicos que contará con habitantes de hasta 206 países diferentes, 13 más de los que reconoce la ONU. Dentro de este selecto grupo, Euskadi pondrá su granito de arena para colgarse una medalla en el apartado empresarial. El COE (Comité Olímpico Español) contará con patrocinadores oficiales que acompañan en cada ciclo olímpico a los 382 deportistas del país. Es el caso de Iberdrola, única representante vasca que estará presente en la ceremonia de inauguración de este viernes y que es el principal promotor del deporte femenino en España.

La empresa vasca, dirigida por Ignacio Sánchez Galán, es una de las compañías más vinculadas a este sector desde hace casi una década, momento en el que decidió ser la cara visible en diversos deportes del país. De hecho, apoya a más de 30 federaciones nacionales que reúne más de 800.000 mujeres federadas, además de impulsar más de 160 competiciones.

De las 36 totales que respalda la compañía eléctrica vizcaína, 24 van a estar presentes desde este viernes en los JJOO de París. Iberdrola, vinculada a ISDE para formar a deportistas, cuenta con un programa específico de embajadoras que está formado por 35 deportistas en total y que visibilizan la competición femenina en los medios de comunicación.

Apoya a más de 30 federaciones nacionales que reúne más de 800.000 mujeres federadas

De hecho, la compañía con sede en Bilbao ha puesto en marcha, en colaboración con el COE, una nueva edición del programa de formación para deportistas en finanzas, economía y derecho. Se trata de la primera empresa que apuesta globalmente por la igualdad y el empoderamiento de la mujer a través del deporte. La aportación de recursos, instalaciones, servicios médicos y árbitros y el fomento y patrocinio de iniciativas por parte de Iberdrola ha ayudado a incrementar en un 39% el número de federadas. Además, para apoyar la marca y a los deportistas que forman parte, el Gobierno vasco destinará para estos JJOO en total 2,4 millones de euros. Se trata de una cantidad que se destina a becar a 80 atletas de élite de la comunidad vasca.

París. EFE

A pesar de todo, que la única compañía representante de Euskadi sea Iberdrola muestra una insuficiencia que, a comparación de Tokio 2020, ha cambiado. No aparecen en estos Juegos otras representantes del empresariado vasco, motor en ciertos sectores del país y que es reconocido como uno de las más destacados a nivel europeo.

Más extraño es esto si se tiene en cuenta, además, que los Juegos se celebran en un país vecino. El dato se quedará como anécdota a nivel deportivo, sí, pero al menos permite reflexionar sobre por qué esto pasa y, por ende, sobre qué puede hacerse para que esto no se repita en los próximos juegos olímpicos de Los Ángeles en 2028. 

Récord reciente

Cabe recordar que Iberdrola ha obtenido recientemente un beneficio neto de más de 4 millones de euros en el primer semestre del año, un aumento de un 64% respecto al mismo periodo del pasado año (2.520,7 millones). Todo ello, impulsado por la plusvalía obtenida por la venta de activos en México y un mejor desempeño operativo. Por otro lado, la cifra de ventas ha bajado un 13,8% y las inversiones brutales en el actual semestre, en cambio, han alcanzado los 5.276 millones de euros. Se trata de un crecimiento del 16%. 

Ha obtenido un beneficio neto de 4 millones de euros en el primer semestre del año, un aumento de un 64% respecto al mismo periodo del pasado año

Hace escasas semanas, además, se hizo con el 80% que aún no controlaba Balantia, compañía creada en 2011 para desarrollar la eficiencia energética y la sostenibilidad en las compañías. La empresa eléctrica vasca ha destacado durante los últimos cuatro años las capacidades tecnológicas de Balantia, que trabaja en la reducción de emisiones y costes de más de 150.000 hogares y empresas.

El presidente de Iberdrola, en la junta de mayo/EFE