Ormazabal logra un acuerdo económico con la plantilla y cierra la fusión de Tecnichapa

Ormazabal cierra tras un proceso de casi dos años la integración de Tecnichapa al lograr un acuerdo con los sindicatos para la unificación de condiciones de las plantillas de ambas firmas. El fabricante vizcaíno de equipos eléctricos deja además junto a este movimiento muy encarrilada la renovación del convenio de Igorre, pendiente desde 2023, en un momento clave de reorganización e impulso del negocio de todo el grupo Velatia.

El conglomerado con raíces familiares que encabeza Javier Ormazabal vive un momento más que dulce gracias a las inversiones para el desarrollo de renovables y la actualización y digitalización de redes eléctricas. Así, lleva tiempo preparando el salto a un nuevo edificio en el parque tecnológico de Zamudio, en el que se instalarán los cuarteles generales tanto de Ormazabal como de Velatia y donde se reagrupará además la actividad de dos empresas más pequeñas del grupo, caso de la recién adquirida Supsonik.

El movimiento busca por un lado ganar eficiencia desde el punto de vista de la gestión y también liberar espacio para la ampliación que ya está en marcha en la principal planta productiva de Ormazabal en el municipio de Igorre. Con cerca de 4.000 trabajadores, más de la mitad en Ormazabal, el grupo Velatia camina con paso firme en dirección a la cota simbólica de los 1.000 millones de facturación (más de 800 millones en 2022 con Ormazabal e Ikusi a la cabeza).

El crecimiento de las ventas y los pedidos se apoya en el gran protagonismo que ha asumido la descarbonización a todos los niveles. Euskadi, sin ir más lejos, está a las puertas de una 'revolución' a nivel de generación renovable, principalmente eólica y fotovoltaica, y se esperan pasos importantes también en la electrificación del transporte (el nuevo Gobierno de Imanol Pradales cuenta de hecho con un departamento específico de Movilidad Sostenible con la socialista Susana García a la cabeza).

Maquinaria de Ormazabal para Iberdrola / Ormazabal

Aval de la plantilla

Velatia va a jugar un papel importante en ambos frentes, en el tirón renovable a través de Ormazabal, uno de los grandes proveedores vascos de Iberdrola, y en el despliegue de la red de cargadores para vehículos eléctricos con Stratenergy. El grupo familiar vizcaíno quiere aprovechar al máximo el contexto y ha dado además un importante paso en clave interna al atar al fin un acuerdo con los trabajadores para proceder a la integración de Tecnichapa dentro de Ormazabal.

Esta unión se inició hace ya casi dos años pero seguía pendiente por diversas causas acordar el encaje de los cerca de 200 trabajadores de Tecnichapa dentro del marco del convenio de Ormazabal. Tras largas negociaciones marcadas por la elección de un nuevo comité único y algunas discrepancias con la parte social, finalmente se ha cerrado un pacto con la mayoría del comité (EHA, LSB-USO y Oficinas), avalado ya por la plantilla de ambas firmas en asamblea, en torno a las categorías, la promoción profesional o ciertos pluses y complementos.

Javier Ormazabal, presidente de Ormazabal, del grupo Velatia / CV

Ormazabal cierra así por un lado definitivamente esa integración en Igorre y, si cabe más importante, sienta las bases de lo que será el convenio para los próximos años en un momento clave para la expansión de esta planta.

El fabricante de equipos eléctricos ha acordado también los ejes de un nuevo acuerdo laboral para esta factoría hasta 2026 que en principio terminará de pulirse tras el verano. Es un espaldarazo que pone fin a las disonancias internas de cara a la estabilidad a medio plazo de un centro de trabajo que asume un nuevo protagonismo a raíz de esa reorganización de espacios dentro del grupo en ese contexto de aumento de la carga de trabajo.