La disputa por el trazado de la Variante Sur Ferroviaria amenaza el impulso del Puerto de Bilbao

"Estamos siendo incisivos y activos", decía en verano el presidente del Puerto de Bilbao, Ricardo Barkala, respecto a las gestiones en Madrid para acelerar los plazos de la Variante Sur Ferroviaria.

Una infraestructura marcada en rojo desde hace años por el equipo de gobierno de la Autoridad Portuaria por el efecto palanca que tendrá para los tráficos una vez se materialice. Hace tiempo que se ve en engranaje ferroviario el gran obstáculo que resta atractivo al principal recinto portuario vasco mientras otros competidores de la cornisa cantábrica sí se ponen al día en ese terreno.

Bilbao, 'top 5' por volumen de toneladas movidas en el entramado de Puertos del Estado, compitiendo incluso por el cuarto puesto tras los 'intocables' Algeciras, Valencia y Barcelona, tiene pendiente actualizar sus conexiones de entrada y salida de ferrocarriles, que comparten vía con las líneas de pasajeros que atraviesan los municipios de la zona.

Ahí la Variente Sur Ferroviaria, cuya pieza central de hecho ya está armada (el túnel bajo el monte Serantes está ya construido, aunque quedaría pendiente su adecuación al proyecto actual), jugaría un papel de 'desatascador' y permitiría un mayor flujo de trenes en momentos punta retirando además tráfico de la línea de cercanías.

Amaia del Campo, alcaldesa de Barakaldo

Una conexión 'eterna'

Un proyecto ideado décadas atrás que tiene su sentido pero complejo a la hora de ejecutar. El pasado año la variante sur recibió un empujón relevante tras el anuncio del inicio inminente de la licitación de la obra, lo que encendió las esperanzas en el Puerto de Bilbao, mientras que en noviembre el Gobierno central aprobaba la primera fase del trazado.

El presidente del puerto de Bilbao, Ricardo Barkala

Es aquí donde han brotado las últimas disputas, al confirmar el consistorio de Barakaldo que llevará esta decisión del Ejecutivo de Sánchez a la Audiencia Nacional al considerar que la ruta debería incluir un tramo soterrado evitando un viaducto en la zona de El Regato de alto impacto medioambiental y visual, en línea con las demandas de los colectivos ecologistas.

En el plano político el proyecto enfrenta a nivel local a PNV y PSE, socios de gobierno en el segundo municipio más poblado de Bizkaia. Los socialistas de Barakaldo han mostrado su disconformidad con la decisión de la alcaldesa jeltzale, Amaia del Campo, de acudir a la Audiencia Nacional y poner el foco sobre el Gobierno central, mientras el Ejecutivo de Imanol Pradales dice respetar el movimiento de la primera fuerza del consistorio.

Panorámica del puerto de Bilbao

"Que se haga ya"

No entra tampoco a la polémica sobre el trazado el presidente del puerto, que eso sí no oculta su interés en que la variante sur "se haga ya". Y es evidente que los recursos y la judicialización del asunto no ayuda a acortar los plazos de la obra, que sigue sin fecha de inicio.

En lo que respecta al puerto, hay que recordar que el crecimiento del tráfico este año se apoya sobre todo en la actividad de Petronor, que más tarde o más temprano deberá vivir una transformación. Aunque hay datos que apuntan en la buena dirección, como la llegada de más granel sólido, sigue sin haber una recuperación de la mercancía en contenedor, directamente ligada al tren.

Y todo ello en una pugna de los puertos del norte por mejorar sus conexiones con el centro de la península para recortar el terreno perdido respecto al mediterráneo.

"En otras latitudes la iniciativa privada es más agresiva, está más comprometida", señalaba Barkala a Crónica Vasca hace unos meses. Tras aparcar el proyecto para una segunda terminal de contenedor, el presidente del puerto reconocía el pasado verano su preocupación por la evolución de los volúmenes de mercancías por este medio.