Planta de Guardian Glass en Llodio (Álava)

Planta de Guardian Glass en Llodio (Álava)

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Todos los inversores interesados en Guardian Glass son vascos

Las instituciones vascas mantendrán una reunión este jueves con uno de los posibles inversores vascos 

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M.A. Lertxundi
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Este miércoles se apagó el horno de Guardian Glass, a la vez que se anunciaba la posibilidad de que varios inversores adquirieran la planta vasca en Llodio. Algo que se hace posible al haber enfriado el horno y no cortarlo de raíz. 

Ahora se conoce que estos inversores son vascos y que las instituciones vascas están ya negociando para hacerse con la multinacional estadounidense Guardian Glass, según informa EFE. 

Esta adquisición permitiría mantener la actividad si se alcanza un acuerdo, y por lo tanto, evitaría el despido de sus 171 trabajadores.

Inversores vascos interesados en Guardian Glass

La diputada alavesa de Desarrollo Económico e Innovación, Saray Zárate, ha confirmado este jueves que "existen inversores interesados en el proyecto", aunque actualmente no hay nada cerrado, sino que la operación se encuentra en una "fase de conversación". Eso sí, hoy mismo tienen una reunión con uno de los posibles inversores.

También ha desvelado que esos empresarios interesados son de Euskadi, que no hay ninguno extranjero, lo que considera algo "todavía más positivo", aunque ha dejado claro que hablarán "con todos" los que puedan querer reflotar esta compañía.

Enfriamiento del horno 

Al igual que hizo el pasado martes el consejero vasco de Industria, Mikel Jauregi, la diputada foral ha puesto de relieve que en la reunión que mantuvieron ese día con los máximos responsables de Guardian ambas partes acordaron hacer un enfriamiento planificado del horno deteriorado.

Ello ha permitido que este instrumento, vital para la fabricación del vidrio, pudiera recuperarse en un futuro si otro inversor se hacía con esta fábrica, algo que no hubiera sido posible si se paraba de forma inmediata.

El proceso de enfriamiento, que durará varios días, lo llevan a cabo técnicos expertos de la planta, así como personal de los departamentos de Industria, Medio Ambiente y Osalan.

"Este enfriamiento planificado requiere de inversiones pero los inversores con los que están hablando conocen esta situación" y eso deja las puertas abiertas a seguir negociando, ha concluido.