
Un vehículo eléctrico recargando sus baterías
El proyecto vasco de baterías alternativo a Basquevolt quiere tener su primera celda en dos años
CIC EnergiGUNE lidera una alianza internacional para una batería en estado sólido con grandes fabricantes como Renault o Toyota
Más información: Basquevolt gana tiempo con otro empujón institucional en su peor momento
Euskadi insiste por distintas vías en busca de un hueco en el prometedor negocio de las baterías. A Basquevolt se suma ahora un nuevo proyecto en este caso en forma de consorcio europeo para lanzar una nueva batería en estado sólido junto a grandes fabricantes como Renault o Toyota.
En ese abanico de socios juega un papel central el CIC EnergiGUNE, que puso la semilla hace unos años de Basquevolt.
Tras dejar volar en solitario a ese primer gran proyecto vasco de baterías, que sigue en busca de un impulso a nivel de inversión para dar el salto a la fase de industrialización, ahora el centro de investigación energética de Miñano se lanza a por esta nueva aventura como socio responsable de la coordinación y el desarrollo del electrolito (la base de la batería).
Solidbat es un proyecto en origen ya mejor armado que Basquevolt al nacer bajo un paraguas formado por 14 grandes entidades colaboradoras de Europa y Canadá, entre ellas el centro vasco Cidetec. Es relevante, además, que en la alianza figuran un par de grandes fabricantes de vehículos como son Toyota y Ampere (Renault), lo que da más garantías de cara al futuro salto comercial.

Solidbat desarrollará baterías en estado sólido
Nuevas puertas
Hay que recordar que es aquí donde se ha atascado Basquevolt. La compañía dirigida ahora por Pablo Fernández-Santos tras la marcha de Francisco Carranza no ha logrado al menos en el plazo establecido dar con la tecla a nivel de un gran fabricante de automoción que confiara en el proyecto en un contexto de grandes dudas en torno a los ritmos a los que se electrificará el transporte por carretera.
Aun así, Basquevolt sigue en esa carrera por tratar de enganchar al mercado y lograr financiación para la primera fase de producción en serie de la batería, de hecho prevé hacer pruebas con grandes fabricantes hacia final de año, pero los plazos no van a ser los que se marcaron en un principio cuando se presentó la que fue una de las grandes apuestas de la anterior consejera de Industria Arantxa Tapia (en el accionariado de Basquevolt están Iberdrola o CIE Automotive).

Reunión del director general de Basquevolt, Pablo Fernández, con el consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad del Gobierno Vasco, Mikel Jauregi
El nuevo máximo responsable de la política industrial vasca, Mikel Jauregi, ha escenificado su apoyo a Basquevolt y ha abierto nuevas puertas para evitar que Euskadi se descuelgue de esa pugna global por contar con actividad productiva vinculada al almacenamiento energético, un punto crítico en la electrificación.
Además de ese nuevo germen de nueva batería en estado sólido vía Solidbat, recientemente Jauregi presentaba en el Parlamento Vasco un acuerdo de compromiso con el gigante del sector Hithium para traer producción a Euskadi, aunque es una declaración de intenciones aun por desarrollar.

Tamaño de una celda de las que desarrolla Basquevolt
Un largo camino por delante
En cuanto a Solidbat, la alianza internacional de centros tecnológicos y universidades ampara un segundo nivel de colaboración empresarial para el desarrollo de tecnología asociada al vehículo eléctrico como en este caso los battery packs (donde se aloja la batería) en el que está la propia Basquevolt y empresas del grupo Mondragon como Fagor Ederlan o Erreka, así como otros centros tecnológicos vascos como Ikerlan o Tecnalia.
Tras el arranque del proyecto, la hoja de ruta pasa por disponer dentro de aproximadamente un año de los materiales y componentes probados y optimizados, para contar a finales del año que viene con la base de la receta de la batería (electrolitos y electrodos).
Ya para dentro de dos años, en torno al ecuador de 2027, Solidbat podría alumbrar la primera celda de 1 amperio/hora (A/H), un hito a nivel de laboratorio a partir del cual la cuestión es ir aumentando el tamaño de la batería. Por hacer la comparativa, Basquevolt desarrolla prototipos de 20 amperios hora y está en camino de dar el salto a los 80 amperios, lo que ya son celdas del tamaño de las que se ensamblan en los coches.