Gonzalo Capellán y María José Sáenz de Buruaga, que presiden La Rioja y Cantabria, sentados entre Mazón y Rueda en la última Conferencia de Presidentes, con Pradales al fondo / Nacho Cubero Europa Press
Cantabria y La Rioja lideran la inversión extranjera en plena pelea con Euskadi por atraer industria
Las dos comunidades gobernadas por el PP afilan sus políticas para amarrar nuevos proyectos vinculados a renovables, baterías o centros de datos
Bizkaia acapara más del 90% de la inversión extranjera en Euskadi
En la década de 2000 coparon titulares las llamadas vacaciones fiscales, unas ventajas tributarias a empresas concedidas por las haciendas vascas años atrás que fueron denunciadas a la justicia europea por Cantabria y La Rioja.
Aquel capítulo fue un punto de inflexión en la pugna histórica entre territorios por atraer inversiones empresariales, con ingredientes tan particulares en el caso de Euskadi como el concierto económico y, en clave negativa, el terrorismo de ETA.
No tan atrás en el tiempo, mediada la década pasada y ya acabada la actividad terrorista, brotaron más choques entre territorios a cuenta de polémicas políticas para ganar atractivo industrial.
Una oferta de terreno barato junto a factores sociales y culturales como una menor conflictividad han servido de reclamos a los gobiernos regionales cántabros para anotarse tantos relevantes en clave industrial, algunos a costa de empresas vascas de primer nivel.
El caso de Tubacex, que abrió una planta en Marina de Cudeyo, fue motivo de choque político entre territorios en la primera legislatura de Iñigo Urkullu, si bien esta no fue la única empresa vasca que optó en esa época por Cantabria para abrir nuevas instalaciones.
Tubacex abrió una planta en Marina de Cudeyo, Cantabria, en 2015
'Guerra' por los enchufes
Al cóctel de factores que determinan si un territorio es o no atractivo se han sumado hoy en día otros aromas, quizá el de mayor actualidad el de los enchufes.
En una economía global en la que hay muchos males de la empresa que son comunes, la infraestructura eléctrica ha cobrado una relevancia crucial hasta el punto de que hay casi una guerra entre comunidades autónomas por lograr mejoras en la red.
Lo cierto es que Euskadi cuenta con una amplia nómina de planes industriales en marcha de la mano tanto de empresas locales como de multinacionales extranjeras y el último acuerdo con el Gobierno central para mejorar la red eléctrica supone un espaldarazo.
El consejero de Industria, Mikel Jauregi, tras anunciar un acuerdo para el aumento de la capacidad eléctrica de Euskadi
El País Vasco es una de las comunidades autónomas que logra mejorar notablemente el volumen de inversión extranjera en la primera mitad de 2025, señal de que el apetito del capital foráneo sigue ahí.
Como se ha destacado en varios estudios recientes, el movimiento de dinero hacia Euskadi ha tenido como gran objetivo la compra de empresas locales y no tanto el impulso a nuevas inversiones productivas, una dinámica que se aceleró el año pasado sobre todo con medianas compañías en el foco y que precisamente busca frenar la nueva política de arraigo industrial del Gobierno de Imanol Pradales.
Pedro Sánchez con la presidenta de Cantabria, Sáenz de Buruaga, en la última Conferencia de Presidentes celebrada en Santander / Nacho Cubero Europa Press
A la cabeza del crecimiento de la inversión
Si el crecimiento de la inversión de fuera de España en Euskadi ha sido considerable, casi el triple que en la primera mitad de 2024, Cantabria y La Rioja se salen del mapa.
La primera multiplica por más de 10 la cantidad de dinero extranjero atraída hasta junio y se va hasta 370 millones (286 millones Euskadi), según los datos del Ministerio de Economía, mientras que la comunidad riojana supera los 400 millones partiendo prácticamente de cero (poco más de 2 millones en el primer semestre de 2024).
En los últimos meses se han producido un par de operaciones de compra de firmas riojanas de mediano tamaño que no justifican por sí mismas el subidón en el gasto.
El presidente de La Rioja, Gonzalo Capellán / E Press
Cantabria y La Rioja, ambas gobernadas ahora por el PP, llegan así al ecuador del curso como cuarta y tercera comunidad autónoma, respectivamente, con mayor volumen de inversión extranjera, por delante de Euskadi y solo por detrás de las intocables en este apartado Cataluña y Madrid.
Y eso cuando ambos territorios han afilado sus políticas para la atracción de grandes proyectos industriales y de hecho han lanzado anuncios vinculados a las renovables, las baterías o los centros de datos.
Cantabria cuenta con una baza importante como es el Puerto de Santander y busca por ejemplo servir de palanca para la eólica marina por su proximidad con Asturias y Galicia, en cuyas costas está prevista la colocación de grandes parques y están alimentando a una industria incipiente en este negocio.
La Rioja es una comunidad pequeña cuya economía sigue muy ligada al vino y la alimentación pero aun así es uno de los territorios con mayor porcentaje de PIB industrial. La comunidad tiene en marcha inversiones ligadas a centros de datos o producción de materiales bajos en emisiones.