Imanol Pradales saluda a Iñigo Urkullu en la toma de posesión del cargo de lehendakari en las Juntas de Gernika / Iñaki Berasaluce Europa Press
Pradales enmienda la política económica de Urkullu con un 'plan total' para la empresa: "Vamos tarde"
La estrategia financiera del Gobierno vasco encumbra a un nuevo instrumento, Indartuz, y redefine Finkatuz para cubrir mejor a pequeñas y medianas compañías
Cantabria y La Rioja lideran la inversión extranjera en plena pelea por atraer proyectos industriales
Pradales logra los primeros mil millones privados para la Alianza Financiera Vasca
No es un borrón y cuenta nueva, pero sí un punto y aparte. Imanol Pradales, buen conocedor del mundo del emprendimiento y la inversión tras su paso por la Diputación de Bizkaia, ha hecho de la política económica una de las grandes apuestas de la legislatura y la brecha con su antecesor, Iñigo Urkullu, es considerable.
La necesidad de fortalecer el arraigo o de recuperar Bilbao como plaza financiera eran conceptos que empezaron a sonar ya en la etapa de Urkullu pero fue en la campaña de las últimas autonómicas cuando la política pública de inversiones escaló a otro nivel.
Pradales, cabeza de lista por el PNV, y su rival de EH Bildu, Pello Otxandiano, compartían en su programa propuestas para alimentar lo que llamaban fondo soberano que, más de un año después, se torna en este plan Euskadi Eraldatuz 2030.
En esencia son mil millones de los presupuestos de Euskadi, una gota en el océano que son hoy en día los verdaderos fondos país, que aspiran a movilizar 3.000 más de bancos, gestoras y family offices. Una chispa para encender la hoguera y dar calor a un entramado industrial que, por otro lado, albergará una veintena de grandes proyectos con su correspondiente asignación económica.
Imanol Pradales junto a los consejeros Jauregi y D'Anjou y el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto / Irekia
Finkatuz sigue vivo, pero cambia el foco
La cosa es que, más allá de las cifras, ambiciosas si se tiene en cuenta el tamaño del territorio aunque siempre condicionadas a que la parte privada haga su parte, hay bastantes diferencias en la letra pequeña de los principales instrumentos inversores que articula ahora Pradales.
El primer detalle es que se opta por mantener vivo Finkatuz, el eje de bóveda de la política de entrada en empresas de Urkullu, pero se le da un enfoque diferente. El cambio más importante es que Finkatuz podrá ahora entrar en compañías que facturen apenas más de 50 millones de euros con un mínimo de 30 empleados, prácticamente pymes.
El giro estratégico ya se intuía en los primeros movimientos del fondo, que ha firmado las primeras inyecciones de la legislatura en Arania y en dos firmas de José Jainaga, Ohmnia e Innometal. Estas dos últimas suman una facturación conjunta de unos 200 millones de euros, muy lejos de otras participadas como ITP o CAF.
Presentación de las últimas inversiones de Finkatuz en Ohmnia e Innometal
Indartuz se lleva el protagonismo
El giro hacia la pequeña-mediana empresa queda respaldado por otras iniciativas financieras dentro del plan Euskadi Eraldatuz 2030, que busca atacar un cierto vacío institucional, el menos desde el Gobierno vasco, en la cobertura a firmas innovadoras con necesidad de crecer en poco tiempo.
Aquí se ponen en marcha nuevos fondos de capital riesgo, uno específico para startups y otro para escalar pymes, y dentro de Indartuz se activan varias líneas también enfocadas a las pequeñas empresas.
Pradales, junto a Pedro Sánchez en una visita a ITP Aero / EFE
La clave aquí es que el nuevo instrumento Indartuz, llamado a asumir el protagonismo esta legislatura y dotado con 400 millones de euros (350 millones emanan de este plan para Finkatuz), busca ser una llamada para el capital de fuera, básicamente grandes partners extranjeros que puedan ver en empresas vascas una oportunidad.
Apetito desde luego no falta y la lista de empresas medianas que han pasado a manos de grupos y fondos foráneos en los últimos años en muy larga.
Ahí sobresalen proyectos de perfil innovador de sectores tecnológicos o biosalud, que necesiten músculo para asentarse en el mercado. Una fórmula podría ser la creación de un fondo específico para este tipo de operaciones con capital minoritario de Lakua acompañando a una gran entidad de la inversión a nivel internacional.
Pradales en el acto de cierre de campaña del PNV para las últimas autonómicas con Urkullu a su espalda / Europa Press
"Cambio de paradigma"
Un salto cualitativo, un cambio de paradigma... fueron algunas definiciones de Pradales a la hora de referirse a esta estrategia global para empresas de todos los tamaños y en cualquier punto del ciclo de vida.
"Vamos tarde y vamos lentos", señaló ayer el lehendakari al exponer el contexto en el que se va a manejar este plan de inversiones, con una industria europea cada vez más amenazada que requiere "tomar riesgos" desde los gobiernos. "Nos jugamos el futuro del país", dijo Pradales en un discurso en el que hizo hincapié en las novedades que aporta Indartuz pero no mencionó a Finkatuz.
Tampoco hay noticias de otras apuestas financieras de la era Urkullu como ABE Capital, bajo gestión privada pero impulsado con dinero de Lakua en 2019, cuando se presentó como pilar para el arraigo junto al propio fondo Finkatuz.