Bien de espuma: recorrido por cervezas artesanales con sello vasco

Aunque la cerveza, sobre todo si se toma bien fría, está unida a esas largas tardes de verano frente al mar para combatir las altas temperaturas, no quiere decir que no se pueda disfrutar de una jarra en cualquier época del año y en cualquier lugar. Una bebida con siglos a sus espaldas y que ha cautivado por su sabor a millones de personas en todo el mundo que buscan ese toque a malta, lúpulo y levadura; los principales ingredientes que sirven de base para elaborar la cerveza. 

Pero, el conocido también como pan líquido, ha cambiado mucho durante su larga historia hasta el punto que hoy en día en el mercado se pueden encontrar un sinfín de tipos diferentes, con otros ingredientes, colores, sabores y olores. Recetas que en su mayoría pertenecen a la elaboración de la mejor cerveza artesanal. Este es un recorrido por esa cerveza menos convencional que se hace en Euskadi. 

GaragArt

Una cerveza nómada como dicen los responsables de esta marca surgida hace casi 7 años en la capital gasteiztarra. Un sueño, el poder elaborar su propia bebida artesanal, que empezó siendo una realidad en el verano del 2014 en las instalaciones de empresas cerveceras amigas al no disponer de una fábrica propia donde llevar a cabo toda la producción. 

Quizá alguno haya descubierto el juego de palabras que se esconde tras el nombre de esta cerveza. Art de arte en inglés y garagardo, de cerveza en euskera. De ahí sale GaragArt que entiende su cerveza como un proceso artístico que posteriormente se embotella dando lugar a un amplio catálogo: cinco de ellas que realizan de forma anual, las de temporada (las bien fresquitas para el verano), las que forman parte de la variedad Cellar Series que se elaboran con más tiempo y tranquilidad en sus barricas; así como colaboraciones con otras marcas. En total casi una veintena de cervezas artesanales diferentes y fácilmente reconocibles por los divertidos motivos de sus etiquetas. 

Býra

No muy lejos de Vitoria-Gasteiz, en la localidad de Nanclares de Oca nació el mismo año que la anterior esta marca de cerveza artesanal con sello vasco con una denominación que en este caso también esconde algo detrás. Býra es una palabra griega que significa cerveza y es el conjunto de letras que dan vida a este proyecto de tradición familiar en el sector que se ha consolidado al mismo tiempo que se han ido elaborando cervezas premium con una línea joven, moderna y natural. 

Las variedades de esta bebida (ALPHA, SIGMA, GAMMA, OMEGA, ENGEL y TEUFEL) que salen de esta fábrica siguen guardando en algunos casos esa referencia al país heleno.Bebidas donde nada más probar algunas de ellas se puede encontrar toda una amalgama de aromas, matices escondidos, sabores y colores que hacen de ellas cervezas jóvenes, naturales, modernas y donde el cuerpo y el carácter son la marca de la casa. 

Cervezas artesanales con sello vasco / BÝRA OFICIAL

La Salve Bilbao

Quizá a algunos de los lectores de estas líneas les resulte conocida la siguiente marca de cerveza artesanal. Se trata de una compañía que empezó su producción hace bastante más tiempo que sus predecesoras, en el año 1886, y estuvo a pleno rendimiento hasta el 1978 cuando se cerró. Muchos años después y ya en pleno siglo XXI el tesón de sus actuales responsables la pusieron otra vez en marcha para crear esta cerveza que quiere ser reconocida como la 'cerveza de Bilbao'. 

Pese a que mantienen una estrecha colaboración con una de las marcas cerveceras más reconocidas de este país, lo cierto es que esta fábrica bien merece la pena destacarse por su trabajo independiente y por ser la cervecera más antigua de España. Una experiencia afianzada que le ha permitido, entre otros, obtener premios en la Barcelona Beer Challenge en los últimos años. 

Boga Garagardoa

La población vizcaína de Mungia acoge esta fábrica de cerveza artesanal que sirve para cerrar esta refrescante y apetecible lista. Un proyecto en forma de cooperativa y que se basa en ingredientes de proximidad para elaborar bebidas de estilo americano con detalles herbales, o del gusto alemán algo más especiada y cítrica. Incluso también hay cabida para esas variedades más fuertes, las más tostadas y cremosas, que bien podrían servirse del cañón de cualquier taberna escondida en Irlanda. 

Además de su elaboración propia, en Boga Garagardoa también funcionan como fábrica colaborativa prestando servicio a terceras marcas. Es así como salen cervezas personalizadas donde, aparte de customizar el tipo de cerveza, se puede elegir un diseño único para las etiquetas, así como los formatos de envasado y presentación de la bebida.