El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha afirmado este lunes respecto al exdirigente alavés de su partido, Alfredo De Miguel, condenado por delitos de corrupción, que "mientras no se dicte una sentencia firme, tiene intactos todos sus derechos, incluidos los laborales". Ortuzar se ha referido así, en una entrevista en Radio Euskadi, a que De Miguel, condenado en 2019 a 13 años de cárcel por la Audiencia de Álava -fallo que está recurrido al Tribunal Supremo- trabaje en la Fundación HAZI, organismo dependiente del departamento vasco de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente.
Tras rechazar la práctica de "amiguismo" en este asunto, Ortuzar ha recalcado que De Miguel "está fuera del partido" y que cuando el Supremo se pronuncie sobre su condena, el Gobierno Vasco "tendrá que cumplir la sentencia, y punto". "Tenemos muy poco margen de maniobra hasta que no se dicte una sentencia firme, porque tiene intactos sus derechos, incluidos los laborales", ha dicho, a la vez que ha cuestionado la "agilidad" de la Justicia en este caso, que se abrió hace 14 años.
Sobre las críticas de los partidos de la oposición, y también del PSE/EE, su socio en las instituciones vascas, a que De Miguel trabaje en un organismo público, Ortuzar ha pedido "mesura" y ha mantenido que "quien esté libre de culpa, que arroje la primera piedra". "No hay amiguismo, la Administración ha hecho lo que se puede hacer", ha asegurado, y en referencia al PSE/EE ha dicho que "espera más seriedad y prudencia en esta cosas, en las que tiene más experiencia que el PNV".