El centro de acogida de refugiados de Vitoria que enfrenta a PNV y PSE será el más grande de España

El centro de acogida de refugiados de Vitoria recién proyectado por el Gobierno central y que tanto está enfrentando a los socios del Gobierno vasco, PNV y PSE, será el más grande de España de estas características. En la documentación que obra en el expediente de la infraestructura, a la que ha accedido Crónica Vasca, puede verse que este macrocentro tendrá una extensión mayor incluso que la suma de los otros cuatro centros similares que hay en el país. Y ofertará el triple de plazas que cada uno de ellos.

Los documentos elaborados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones detallan numerosas cuestiones sobre la construcción en la capital de Euskadi. Entre otras cosas, se define a estos Centros de Acogida de Refugiados (CAR) como "un instrumento para garantizar la cobertura de las necesidades básicas y la integración de aquellas personas solicitantes o beneficiarias de Protección Internacional, del estatuto de apátrida y de Protección Temporal por ver amenazados sus derechos fundamentales en sus países de origen". 

El ministerio que dirige José Luis Escrivá expone que existen otros cuatro centros de este tipo en España: dos de ellos están en la Comunidad de Madrid (Alcobendas y Vallecas), uno en Valencia (Mislata) y otro en Andalucía (Sevilla). El nuevo centro, que se construirá en Vitoria por la vía de urgencia y que podrá estar terminado aproximadamente a mediados de 2024, será el más grande y mejor equipado de todos. Con mucha diferencia. 

Vista aérea del lugar donde se pondrá en marcha el centro de acogida de refugiados.

Como viene informando Crónica Vasca, el macrocentro vitoriano estará ubicado en la antigua Clínica Arana de la capital de Euskadi, que se ubica en el barrio de Salburua. Tendrá capacidad para 350 personas, supondrá una inversión de 14,1 millones de euros y contará con una extensión de 16.000 metros cuadrados totales, de los que 13.000 estarán construidos. Habrá dos edificios, uno de 8.000 metros cuadrados y otro de 5.000. Dimensiones mucho mayores que las de los centros ya existentes. 

Comparación con los otros centros

El más moderno de los otros cuatro centros que por ahora hay en España es el ubicado en Sevilla, que se construyó en el año 2000, mientras que los otros tres son de décadas anteriores. El centro sevillano también es el más grande, con una parcela de 7.074 metros cuadrados de los que 4.686 están construidos, muy por delante de los 4.873 metros cuadrados totales del centro de acogida valenciano y los poco más de 2.400 metros cuadrados de cada uno de los centros madrileños. Así, como ya se ha dicho, el nuevo centro vitoriano será tan grande como la suma de los otros cuatro existentes en toda España.

Esas diferencias también son palmarias, por consiguiente, en cuanto a las plazas ofertadas para refugiados en cada una de estas infraestructuras públicas. Ninguno de los cuatro centros citados supera las 120 plazas para residentes. Así, el centro vitoriano que ya está en marcha triplica el número de personas a las que podrá atender.  

Fuerte controversia entre PNV y PSE... y muchas críticas

La decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de poner en marcha este macrocentro de acogida de refugiados en Vitoria ha generado un auténtico terremoto político que va creciendo con el paso de las horas. El Gobierno vasco, el Ayuntamiento de Vitoria y el PNV, que gobierna ambas instituciones, han expresado su malestar con la decisión "unilateral" del Ejecutivo que, en su opinión, contraviene el "modelo vasco de acogida", que es ante todo "individualizado". 

En cambio el PSE, que cogobierna con los peneuvistas también ambas instituciones, está a favor de la construcción del centro. Este jueves su líder, Eneko Andueza, arremetía con dureza contra el PNV por hacer "electoralismo" con esta cuestión y por exhibir un discurso "cercano a la rancia extrema derecha". Después, el PNV acusaba al secretario general de los socialistas de "hacer demagogia" vertiendo "acusaciones falsas e inaceptables" contra la formación nacionalista. "No todo vale en política, señor Andueza", remachaban los jeltzales. 

Obviamente este cruce de acusaciones complica la alianza gubernamental entre socialistas y peneuvistas. Pero hay muchas más críticas. Toda la oposición está en contra del centro. Bildu, Elkarrekin Podemos y PP+Cs han mostrado su rechazo a la construcción. El caso, además, ya ha llegado al Parlamento vasco, donde la coalición de centroderecha ha registrado una proposición no de ley para instar al Gobierno central a paralizar las obras aún no iniciadas.