Otegi se separa de la inclusión de exetarras en las listas: "No fue una decisión política consciente"

El secretario general de EH-Bildu, Arnaldo Otegi, ha tenido que pronunciarse una vez más sobre la inclusión de los 44 condenados por pertenencia o vinculación a la banda terrosita ETA en las listas de la formación abertzale que él dirige, después de que la Audiencia Nacional confirmara este jueves que la exetarra Sara Majarenas -que está dentro de la candidatura del municipio guipuzcoano de Astigarraga- continuaba inhabilitada para ser elegida y tomar un cargo público. 

Otegi, que ha visto como prácticamente toda la campaña electoral se ha centrado en esta polémica, especialmente durante la primera semana -antes de que los siete exterroristas condenados por delitos de sangre anunciaran que no iban a tomar posesión de su cargo-, rechazó este jueves en una entrevista a la cadena SER y que recogió Europa Press que incluir en las candidaturas de la coalición soberanistas a estos 44 condenados de ETA que ya habían cumplido su pena fuera "una decisión política consciente", en respuesta a muchas otras figuras políticas y asociaciones que durante estas semanas han afirmado lo contrario. 

Así, el dirigente abertzale pidió sus "disculpas más sinceras" a quienes entendieran que Bildu había tomado esta decisión conscientemente, y aseguró que esto no sería "congruente" con la declaración que hizo su partido en Aiete, en la que mostraron su pesar a las víctimas de la banda y pidieron no "añadir más sufrimiento al sufrimiento".

El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, junto a candidatos de su partido en Vitoria. EP

También, en referencia a los siete condenados por delitos de sangre, a los que llamó "compañeros", aseguró que su decisión de no echarse a un lado, "fue una contribución coherente con las posiciones que EH Bildu ha defendido", ante lo que añadió que quienes piensan "que Bildu, a estas alturas del partido, hace cosas para elevar el sufrimiento de la gente o para añadir sufrimiento a la gente, se equivoca de plano", denunciando además que ciertos sectores habían formado parte "de una campaña bastante sucia".

En esta línea, ante quienes aseguran que el Partido Socialista había presionado para que estos siete antiguos miembros de ETA tomaran la decisión de no tomar posesión del cargo, Otegi mostró su rotunda negativa, asegurando que esto era "parte de la campaña de la extrema derecha" y aseveró que, "hay gentes en el país que han sido víctimas de la violencia de ETA que se acercan" a la coalición soberanista, "con posiciones sinceras y honestas". Como es el caso del exjuez Manuel Díaz de Rábago, amenazado por la banda terrorista durante 10 años.