EH-Bildu no debe estar contento con el acuerdo que este viernes han reafirmado PNV y PSE-EE para gobernar en conjunto todas aquellas instituciones vascas donde se necesitan para poder acceder al poder. Aunque el pacto no es una sorpresa, y era el camino lógico para las dos formaciones que conformar el Ejecutivo vasco, la coalición soberanista ha visto como finalmente sus dos grandes victorias del pasado 28-M, Vitoria y Gipuzkoa, se les escapan y serán jeltzales y socialistas quienes, en coalición, se harán con ambas instituciones.
Con este acuerdo, PNV y PSE se aseguran el control de los tres territorios de Euskadi y de la 'makila' de una treintena de ayuntamientos en los que ninguna de las dos formaciones contaba con mayoría absoluta. Además, en algunos de estos, como la capital alavesa, Durango u Oion, necesitan también de los votos del Partido Popular para poder desbancar a Bildu.
Si consiguen convencer a los populares de que les presten sus votos -que el PP vasco ya ha ofrecido, pero con condiciones- peneuvistas y socialistas evitarían así que la izquierda abertzale se haga con el Consistorio de Vitoria por primera vez en su historia y le arrebatarían dos de sus grandes feudos históricos.
Más fácil lo tienen en San Sebastián, Bilbao, Álava, Bizkaia, y otros tantos territorios en donde al ser los nacionalistas primera fuerza, el gobierno del PNV era indiscutible. Y, pese a necesitar de los votos de otras formaciones, en este caso, con el apoyo ya cerrado de los socialistas, los gobiernos jeltzales están asegurados.
Gracias a la reedición del pacto global, PNV y PSE se aseguran el control de 3 Ayuntamientos en Álava: concretamente los de Legutio y Amurrio, donde el candidato peneuvista se haría con la alcaldía; y en Iruña de Oca, donde el Consistorio iría a manos de los socialistas.
En Gipuzkoa 10 municipios caerán en manos de uno de estos dos partidos, 6 para los nacionalistas: San Sebastián, Elgoibar, Legazpi, Urnieta, Urrentxu y Zarautz; y 4 para el PSE: Zumárraga, Eibar, Irún y Lasarte. En todos ellos jeltzales y socialistas contarán con mayoría absoluta, y solo en Legazpi desbancan a la izquierda abertzale.
Y por último, en Vizcaya son 18 las localidades que gracias a este acuerdo el Consistorio pasa a ser de uno los socios del Ejecutivo vasco: en concreto Bilbao, Abando, Amorebieta, Balmaseda, Barakaldo, Basauri, Berango, Berriz, Derio, Erandio, Leioa, Mungia, Ortuella, Santurtzi y Sestao, serán para el PNV; y Ermua, Muskiz y Trapagaran para el PSE.
A esta treintena de ayuntamientos donde son necesarios los pactos, se suman las 38 alcaldias aseguradas por mayoría absoluta para el PNV y el PSE en Vizcaya (37 y 1 respectivamente); las 19 en Álava (18 para los nacionalistas y 1 para los socialistas); además de las 3 que el PNV conserva en Gipuzkoa y la única del PSE, en el múnicipio de Larraul.