Lo que hasta hace una semana parecía casi imposible empieza a verse como probable en Euskadi. Las "nuevas alianzas" que proponía Arnaldo Otegi este domingo y la 'operación Borgen' que no descarta Eneko Andueza parecen acercar con una celeridad inusitada a EH Bildu y PSE. Que ambos pacten de una u otra forma tras las elecciones autonómicas de 2024 ya no es una quimera.
La moción de censura pactada por socialistas y abertzales en Pamplona ha variado el rumbo de la política en el País Vasco. Si bien es cierto que en un primer momento parecía que este movimiento orquestado desde Moncloa y Ferraz dinamitaba la estrategia del PSE para las elecciones vascas, las tornas han cambiado con el paso de los días.
Los socialistas vascos están sacando provecho a esa moción. Porque se dejan querer y no descartan que, como en la serie danesa 'Borgen', la tercera fuerza pueda gobernar Euskadi con los votos de la segunda. Es decir, que Bildu 'regale' sus apoyos para hacer lehendakari a Andueza.
Joseba Asiron y Bakartxo Ruiz en el acto de Bildu de este domingo.
"Haremos la reflexión"
Este mismo domingo, en una entrevista con 'El Periódico', Andueza volvía a sugerir esta posibilidad. Porque no descartaba recibir los votos abertzales. "Si llega, haremos la reflexión". "Que yo haya descartado firmar un acuerdo de gobierno con Bildu no significa que vaya a reeditar el pacto con el PNV". "Igual son otros los que tienen que hacer la reflexión de si van a apoyar a un lehendakari socialista". "El Partido Socialista es el único que puede decir que es capaz de llegar a acuerdos con todos los grupos políticos".
Declaraciones todas ellas que abonan nuevamente una posibilidad que sigue pareciendo remota, porque si, como dicen los sondeos, Bildu sigue creciendo y es segunda fuerza, muy cerca del PNV, resultaría complicado que regalase esos apoyos a un candidato con la mitad de escaños que ellos. Más lógico sería, claro está, que Arnaldo Otegi y los suyos pidieran los votos al PSE para desalojar a los peneuvistas.
Por encima de las cábalas sobre los resultados, una cosa es segura en las inciertas elecciones vascas de 2024: el PSE volverá a tener la llave del Gobierno vasco y decidirá quién se sienta en el Palacio de Ajuria Enea. Por ello desde Bildu enviaban a los socialistas un mensaje nítido este domingo en boca de Otegi: "Euskadi se merece nuevas alianzas".
Momento de la intervención de Pello Otxandiano en el acto de Bildu celebrado en Bilbao.
Bicefalia de Bildu
El recién elegido como candidato de Bildu, Pello Otxandiano, no abordó la política de alianzas durante su discurso en el acto celebrado en Bilbao. Un acto que precisamente servía como puesta de largo del joven aspirante, por supuesto acompañado por Otegi para la ocasión. Se visualizaba así la nueva bicefalia de la coalición abertzale.
Es evidente, por otro lado y como ya contó este diario, que la renuncia de Otegi y la elección del propio Otxandiano, que no es un rostro de la vieja Batasuna y, por ello, carece de la 'mochila' sobre el terrorismo de ETA, busca allanar el terreno para un hipotético entendimiento con el PSE y Podemos-Sumar.
En el PNV, entretanto, siguen confiando en que el PSE optará por mantener el statu quo de Euskadi. Peneuvistas y socialistas gobiernan juntos la comunidad desde hace dos legislaturas y, además, se reparten el poder en las tres grandes ciudades y las tres diputaciones forales del País Vasco.
La formación liderada por Andoni Ortuzar firmó un pacto de legislatura con Pedro Sánchez. En Sabin Etxea creen que ese acuerdo no permitirá sobresaltos después de las elecciones vascas. Aunque todo dependerá de los resultados que arrojen las urnas. Y de lo que después decida Sánchez, claro.
Los tres líderes de Bildu, Arnaldo Otegi, Pello Otxandiano y Maddalen Iriarte, saludan a los presentes.