Pradales elude la reducción de penas a etarras y defiende a las víctimas "silenciadas injustamente"

El Palacio de Congresos Europa de Vitoria-Gasteiz acoge los días 8 y 9 de octubre la Conferencia Internacional de Víctimas del Terrorismo, organizada por Naciones Unidas y el Ministerio de Asuntos Exteriores y en la que también participa el rey Felipe VI. Una conferencia que, a lo largo de estos dos días, reúne a más de 300 personas de 23 estados miembros de la ONU, organizaciones internacionales, instituciones y sociedad civil.

Estas jornadas tienen como objetivo que representantes de países, expertos, profesionales y víctimas del terrorismo debatan sobre el papel de la educación en el apoyo a los derechos y las necesidades de las víctimas. Tras varias intervenciones a lo largo de la mañana, por la tarde ha sido el turno del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, el lehendakari, Imanol Pradales, y el rey Felipe VI.

El lehendakari, Imanol Pradales, ha comenzado su discurso recordando dos experiencias que "vivió de cerca". La primera, del 9 de marzo de 2001, día en el que terroristas de ETA mataron en Hernani, con un coche lleno de explosivos, a su compañero de clase, Iñaki Tororika, de tan solo 25 años. La segunda, del 20 de enero de 1980, cuando una bomba colocada por Grupos Armados Españoles en la puerta de un bar de Alonsotegi mató a cuatro personas.

"Todos ellos con un mismo denominador común", ha proseguido el lehendakari. Por una parte, "el uso de la violencia para acabar con quien no piensa igual" y, por otra, "personas que amparan, apoyan y, en algunos casos, financian esta estrategia de violencia y terror". 

Con estas dos experiencias, Pradales ha querido mostrar que en Euskadi "sabemos bien lo que es sufrir el terrorismo". "De todos los lados, el rostro del terrorismo tiene la misma cara, en todos los casos. Y es el de un oscuro rostro". 

El rey Felipe VI es recibido por el lehendakari, Imano Pradales, a la entrada del Palacio Europa / L. RICO - EFE

"Víctimas injustamente silenciadas"

En un discurso en castellano, inglés y euskera, Pradales ha destacado "el deber de reconocer el daño causado, condenarlo y asumir responsabilidades". Además, ha defendido que la "prioridad" de Euskadi es "avanzar en un modelo de convivencia asentado sobre cuatro pilares": deslegitimación de la violencia, reconocimiento integral de las víctimas, construcción de una memoria inclusiva, crítica y ética y la defensa de los principios y valores éticos y democráticos.

Además, ha recordado que no se puede permitir la construcción de un "relato sesgado". "Por justicia hacia los que sufrieron la lacra del y terror y porque no pueden volver a repetirse hechos similares". En este sentido, ha señalado que el olvido "es una forma de injusticia" y que la falta de información y formación puede provocar que las nuevas generaciones adopten ideologías totalitarias. 

Imanol Pradales ha querido ensalzar también el papel de las víctimas y de sus familias, "tan injustamente silenciadas". "Condenadas, en muchas ocasiones, al ostracismo, cuando no a la discriminación. Aplaudimos y agradecemos de corazón su contribución a la paz".

Asimismo, ha destacado que siempre han tenido solidaridad "con todas las víctimas, sin ninguna excepción". En su intervención, el lehendakari no se ha pronunciado sobre la reducción de penas a etarras tras el cambio legal aprobado por unanimidad en el Congreso de los Diputados.

Vitoria-Gasteiz ha sido elegida como sede de este evento por la presencia del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo con el objetivo de atraer a representantes de otros memoriales de renombre internacional.