Es uno de los grandes temas de la semana. Lejos de cesar, la batalla política desatada entre PNV y EH Bildu a cuenta de las últimas agresiones a la Ertzaintza crece cada día que pasa.
La pelea entre las formaciones nacionalistas estalló a raíz de la agresión a los ertzainas del pasado fin de semana en Azpeitia (Gipuzkoa). Y este viernes el PNV ha elevado el tono sobremanera contra la coalición abertzale.
Más en concreto, Andoni Busquet, miembro de la dirección peneuvista, ha acusado a Bildu de de "justificar lo injustificable", en alusión a "comportamientos que transgreden la Ley" y que se expresan "de una forma violenta muy frecuentemente".
Asimismo, ha dicho que la formación soberanista ha dado "un paso más" al poner "en el disparadero" a la Ertzaintza y a las Policías Municipales "en una actitud totalmente irresponsable", algo que a su juicio no es lo que "el pueblo demanda y necesita".
El jeltzale ha asegurado que lo que precisa la ciudadanía vasca "es bastante obvio: seguridad, paz y responsables políticos que velen por esa paz y por esa seguridad, y actúen de una forma responsable". Frente a ello, ha dicho que "hay quien parece que quiere seguir calentando el ambiente festivo".
Con esas palabras, el dirigente peneuvista lanza un nítido mensaje a Bildu veinticuatro horas después de que los soberanistas cuestionasen que la Ertzaintza sea una Policía "democrática", calificasen de "inaceptables y desproporcionadas" sus últimas actuaciones en Vitoria y Azpeitia y exigieran "una reforma en profundidad del modelo policial".
Los ataques cruzados entre PNV y Bildu por el modelo de la Ertzaintza no son nuevos, pero se han recrudecido esta semana. Y, a la vista de sus posiciones, no parece posible un acercamiento en esta cuestión.
Entretanto, los agentes de la Policía Autonómica han expresado estos días su enorme malestar por sucesos como los citados de Vitoria y Azpeitia u otros precedentes en Ordizia y Hernani. En todos ellos, hubo agentes heridos.