Los 19 detenidos en la batalla campal en Vitoria entre La Falange y radicales abertzales ya han sido puestos en libertad

Cargas policiales, peleas, agresiones, quema de contenedores... Una auténtica batalla campal se ha vivido este domingo en el centro de Vitoria, con una veintena de agentes heridos y casi otros tantos detenidos, a raíz de la presencia de Falange Española y de los ataques de jóvenes radicales abertzales. 

En concreto, la Ertzaintza detenía a 19 jóvenes acusados de desórdenes públicos, tras unos incidentes registrados por una contramanifestación de más de un centenar de personas a una concentración de Falange Española, con motivo del día de la Hispanidad, según ha informado el Departamento vasco de Seguridad a Europa Press.

Todos ellos, incluido un menor, ya han sido puestos en libertad aunque deberán comparecer ante la autoridad judicial cuando sean citados.

Agentes de la Ertzaintza y manifestantes antifascistas este domingo en Vitoria. Redes

A las doce del mediodía estaba convocada en la plaza de la Provincia de la capital alavesa una concentración de la Falange Española, bajo el lema 'La unidad de España, ni se vota, ni se negocia', que ha contado con la presencia de decenas de personas que portaban banderas españolas, coreaban 'No nos engañan, Vasconia es España' y hacían el saludo fascista.

Los concentrados, que estaban rodeados por un cordón policial y vigilados por un fuerte dispositivo de la Ertzaintza, han acabado cantando el 'Cara al sol'.

A la misma hora y a unos 650 metros, en la plaza del Arca, se había convocado también una concentración "anticolonial" y "frente a la ola reaccionaria". Entre los convocantes estaban las organizaciones juveniles abertzales, como GKS o Antifaxista, entre otras. 

Miembros de la Ertzaintza frente a las protestas de GKS en Vitoria L. Rico EFE

Más de un centenar de jóvenes encapuchados y vestidos de negro de ideología abertzale se han ido acercando hasta la plaza de la Provincia y aledaños, donde ha comenzado el lanzamiento de objetos, como sillas de los bares cercanos, el vuelco y quema de algún contenedor.

Los grupos autodenominados como "antifascistas" gritaban consignas como "alde hemendik, utzi pakean'  o "españoles, hijos de puta". 

Entre tanto odio desatado por ambas partes, el choque era inevitbale. Ha habido enfrentamientos directos con los concentrados de Falange, lo que ha hecho intervenir con varias cargas a la Brigada Móvil de la Ertzaintza con material antidisturbio.

La Policía autonómica había movilizado numerosos recursos de dicha brigada, con imágenes de dron y helicóptero para controlar los incidentes desarrollados en varias calles céntricas de la capital alavesa, donde los alborotadores han quemado algunos contenedores urbanos.

Como resultado, la Ertzaintza ha detenido a 19 individuos y una veintena de agentes han resultado heridos. 

El sindicato Euspel del cuerpo autonómico ha publicado en las redes sociales un comunicado donde muestra su total respaldo a los agentes heridos y denuncia "la falta de medios" tanto en el dispositivo de este domingo como en general. 

También el sindicato ESAN ha denunciado que los incidentes ocurridos en Vitoria este domingo "evidencian que la Ertzaintza no dispone del personal suficiente para afrontar con garantías situaciones de alta tensión y riesgo".

El Sindicato Profesional de la Ertzaintza, SiPE, ha calificado el dispositivo desplegado este domingo en Vitoria de "desastre organizativo" y cree que "evidencia la incapacidad de la dirección del Departamento de Seguridad", además de exigir responsabilidades.

Palabras de la alcaldesa

La alcaldesa de Vitoria, Maider Etxebarria, ha expresado su condena y rechazo a los incidentes que han tenido lugar este mediodía en elcentro de la ciudad, que se han saldado con 17 detenidos acusados de desórdenes públicos, tras los enfrentamientos entre jóvenes antifascistas y concentrados de Falange Española.

En un mensaje de redes sociales recpogido por EP, Etxebarria ha considerado estos altercados "una demostración más de lo que generan los discursos radicales: odio y violencia". "Estas actitudes no tienen cabida en nuestra ciudad", ha indicado.