ELA exige mejoras en las condiciones laborales del nuevo convenio del comercio textil de Gipuzkoa

El sindicato ELA exige a la Federación Mercantil de Gipuzkoa y a Adegi que acepten mejoras salariales por encima del IPC y reducciones de jornada a los trabajadores del comercio textil de Gipuzkoa, que negocian un nuevo convenio.

El sindicato ha protagonizado este miércoles una concentración de protesta ante la Federación Mercantil para exigir estas mejoras y reclamar que se acuerde un nuevo convenio colectivo. En este contexto, el Consejero de Turismo, Comercio y Consumo, Javier Hurtado, apuntó ayer en una entrevista de la cadena Ser, que se destinarán 20 millones de euros por parte del Gobierno Vasco en un plan de impulso al sector comercial, para intentar paliar la situación económica inducida por la invasión de Ucrania.

“Serán 15 millones en ayudas directas a los subsectores más afectados por la crisis, concretamente al sector textil y al del equipamiento del hogar. A esto se añade un mínimo de 5 millones para bonos al consumo", señaló, y aclaró que abrirán la opción a otras instituciones "a sumarse al programa de bonos comercio para coordinar un programa conjunto”.

Bajada anual de horas e incrementos salariales

ELA -que representa al 85 % del sector- reclama una bajada anual de horas, incrementos salariales por encima del IPC, "abordar la excesiva parcialidad no voluntaria" e incluir un plus por antigüedad "en un sector sin posibilidades de promoción", ha informado la central en un comunicado.

El sindicato ha explicado que el último convenio (2010-2018) fue impugnado por las patronales Federación Mercantil y Adegi y finalmente se estableció que fuera de eficacia limitada, por lo que cubre al la mayoría de los trabajadores pero no a todos, ya que a algunos se les aplica el anterior acuerdo (2006-2009).

Además, el cierre de ocho tiendas de ropa de grandes cadenas desde diciembre de 2020 ha supuesto la destrucción de 60 puestos de trabajo, según ELA.

La mesa negociadora del convenio se constituyó el 28 de septiembre, pero las propuestas planteadas por las patronales no convencen a ELA, que denuncia un pérdida de poder adquisitivo del 9,6 % entre los años 2010 y 2020.