Esta es la calle más oscura de Bilbao: la inesperada historia de un tramo con muchos años detrás

Bilbao es una villa nacida en el año 1300 y que fundó Don Diego López de Haro V, Señor de Bizkaia. Aunque según el Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Bilbao, Bilbao Izan, esta villa ya existía "desde el siglo anterior como núcleo poblado a ambos lados del Nervión-Ibaizabal". Justo en el punto donde el río "dejaba de ser ría, en el último vado antes de su desembocadura en el mar Cantábrico". 

Su corazón, el Casco Viejo, con más de 700 años de historia, ha sido una de las zonas más queridas y es ahora una de las más transitadas por los bilbaínos. Al principio lo componían tres calles: Somera o Goienkale (que significa "la calle de arriba"), Artecalle o Artekale ("la calle del medio") y Tendería o Dendarikale ("calle de las tiendas"). Así lo expone la revista de historia de National Geographic Por qué en el Casco Viejo de Bilbao hay un club de Gordos (y otras muchas curiosidades). La primera es la más antigua y el sitio de reunión de las cuadrillas para tomar algo. 

Después se crearon cuatro calles más: Belosticalle o Belostikale ('calle de la pesquería'), Carnicería Vieja o Harategi Zahar, Barrencalle o Barrenkale ('la calle de abajo') y Barrencalle Barrena o Barrenkale Barrena ('la calle de debajo de allí'). Así nació el concepto de las Siete Calles.

La calle más oscura de Bilbao

En el siglo XV se derribó la muralla de seis o siete metros de alto y dos de ancho dedicada a proteger la villa para expandir la ciudad. Una muralla que rodeaba las calles de Somera para continuar por las de Perro, Pelota, Perro, Lotería, Banco de España, Santos Juanes, y acababa en la calle Ronda. Esta última es conocida como la calle más oscura de Bilbao. 

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Su nombre está relacionado con los turnos de vigilancia que hacían los soldados en la muralla, tal y como apunta la revista. En esta misma calle además, en el número 16, nació el escritor Miguel de Unamuno en 1864. Uno de los ilustres más importantes de la Generación del 98. Este fue muy querido por los vascos y por sus vecinos.

El escritor Miguel de Unamuno. Wikimedia Commons

Tanto es así que la Plaza Miguel de Unamuno, también en el casco antiguo, cuenta con una escultura suya. Asimismo, en su casa, anteriormente, había una pintada de su cara en la puerta del portal y actualmente se puede observar una placa a modo de recordatorio.