El periodista vasco Pablo González ha sido liberado en el marco de un intercambio de periodistas presos entre Rusia y Polonia. Nacido en Moscú y con doble nacionalidad, española y rusa, fue detenido el 28 de febrero de 2022 en Polonia cuando cubría el éxodo de personas refugiadas al comienzo de la invasión de Ucrania, acusado de ser espía ruso.
Desde entonces se encontraba en prisión preventiva en Polonia, por lo que ha pasado más de dos años y medio en la cárcel de Radom, a un centenar de kilómetros de Varsovia. Ahora, según ha informado su abogado a través de un comunicado, ha sido liberado y trasladado a Rusia, su país natal.
"Esta liberación se ha producido en el marco de un intercambio entre Rusia y Polonia de periodistas presos en ambos países, un hecho que marca un hito significativo en favor de la libertad de todos los periodistas que se encuentran en estos momentos presos en diversos países", destaca su abogado, quien ha esgrimido las razones humanitarias como "primordiales" en la decisión de trasladar a Rusia a Pablo González y al resto de periodistas presos, "reconociendo el valor y la importancia del periodismo en la sociedad".
"El intercambio ha sido posible gracias a intensas negociaciones entre las partes implicadas y a un exhaustivo trabajo jurídico que ha asegurado un marco legal adecuado para su materialización garantizando el respeto a los derechos y la dignidad de los periodistas involucrados", ha manifestado.
Asimismo, ha anunciado que Pablo González comparecerá ante los medios "cuando esté en condiciones" y ha expresado el agradecimiento de Pablo González y de su familia a todas las personas y organizaciones, especialmente al movimiento #FreePablo, "que han trabajado incansablemente para lograr este resultado".
Confirmación por parte de Polonia
El portavoz del Ministerio del Interior polaco, Jacek Dobrzynski, ha asegurado que la decisión de incluir a González en el canje se ha basado en los "estrechos vínculos polaco-estadounidenses", así como "la cooperación aliada", "los intereses comunes de seguridad" y la "misma comprensión en los valores democráticos".
Por último, el comunicado emitido por el abogado de Pablo González hace alusión a que "las autoridades rusas han demostrado un interés real en buscar una solución a esta situación, mientras que otros se han centrado principalmente en criminalizar a Pablo González en lugar de defenderle y proteger sus derechos como periodista", denuncia.