⁠La ruta con una cascada para bañarse a una hora de Bilbao: ideal para las vacaciones de verano

En Euskadi es habitual animarse a hacer cualquier tipo de ruta en cualquier estación del año: otoño, invierno, primavera o verano. Los impresionantes paisajes del País Vasco conservan su esplendor durante todo el año. Flores, lagos, bosques, nieve… no importa. Lo esencial es que uno se sienta como dentro de un cuento de hadas.

El territorio vasco brinda infinitas rutas para disfrutar de su belleza de múltiples maneras, por lo que muchos ciudadanos se dedican a organizar caminatas, especialmente los fines de semana. Hay una en la provincia de Álava, que destaca como la más impresionante del territorio vasco por sus zonas boscosas y sus cascadas.

Así es la ruta ideal para hacer en verano en Euskadi 

La ruta del agua del río Inglares sigue el curso del río y comienza en el estacionamiento de Berganzo, en el municipio alavés de Zambrana. El pueblo de Berganzo, junto con Ocio y Portilla, es uno de los tres pueblos que componen esta espectacular visita. Esta ruta circular y sencilla de dos horas y media que concluye en el centro de Berganzo ofrece todo lo que un turista busca: paisajes asombrosos, bosques, cascadas cristalinas, un recorrido fácil y pintorescos pueblos rurales, según informa la página web de Turismo Vasco.

La caminata comienza en Berganzo siguiendo las claras señales de la ruta del agua: dos líneas de color blanco y azul. La primera parte del camino está llena de árboles y presenta un desnivel hasta llegar a un cruce. En este punto, hay que girar a la izquierda y descender hasta el río Inglares.

El desnivel de 200 metros que tiene la ruta forma cascadas y rápidos ideales para observar y fotografiar. Una vez se recorre la 'ida', se llegará a una carretera que debe ser cruzada. A unos 5 minutos, según la web, el turista verá la cascada de las Herrerías. Es crucial bajar hasta el río para obtener una buena vista de esta.

Este es el recorrido completo de la ruta

Para continuar, hay que pasar la cascada por la izquierda y subir una pendiente bastante pronunciada. Al llegar a la cima, el visitante estará listo para emprender el camino de regreso y se encontrará con el canal de agua de la central hidroeléctrica.

El camino de regreso es diferente al de ida. El primero está rodeado de bosques en la parte baja, cerca del río, mientras que el de vuelta recorre la zona desde arriba, ofreciendo vistas increíbles y cerca del canal de la central. A lo largo del recorrido habrá diversos parajes, “como los túneles esculpidos en la roca para el paso del canal, espacios únicos que añaden aún más belleza al trayecto”.

El final de la ruta está marcado por una llave de hierro que regula el canal. Luego, el camino desciende hasta Berganzo, donde se pueden realizar diferentes actividades adicionales con amigos o familiares. Eso sí, antes de hacer la ruta es necesario reservar para aparcar en Berganzo por tres euros, y quienes deseen realizarla deberán pagar a través de la plataforma PVerde.