El 86% de los ciudadanos europeos piensan que la rápida propagación de la desinformación es un problema para la democracia

El 86% de los ciudadanos europeos piensan que la rápida propagación de la desinformación es un problema para la democracia Unsplash

Sociedad EGIA EDO GEZURRA

Las diez recomendaciones del Colegio Vasco de periodistas contra los bulos

El Colegio Vasco de Periodistas ha desarrollado, junto a la Diócesis de Bilbao, un decálogo para el uso ético de la IA en los medios de comunicación

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Ya han pasado veintiséis años desde que Google nación en un garaje de California de la mano de Larry Page y Sergey Brin. Lo hizo como el Mito de la Caverna de Platón, cuando los prisioneros son liberados y salen de la cueva, conocen la verdad, y nunca nada vuelve a ser lo mismo. Google configuró entonces una nueva realidad y no hubo marcha atrás. 

Lo mismo está ocurriendo hoy en día con la Inteligencia Artificial (IA) que, con su desarrollo, ha seguido configurando la sociedad moderna transformando cómo los usuarios interactúan con la información. Ambas herramientas, muy estrechamente ligadas entre sí, marcan la inmediatez y la abundancia de la información, y, en muchos casos, también la desinformación. 

Según la Unión Europea, el 85% de los europeos coincide en que la rápida propagación de la desinformación es un problema importante para la democracia, lo que les ha llevado a ellos y a otras instituciones a crear sus propios manuales éticos sobre cómo luchar contra los bulos y fake news

Asimismo, el 71% de los ciudadanos europeos afirman que a menudo se encuentran con desinformación. Como afirma José Luis Orihuela, profesor universitario, conferenciante y autor, “con la sobreabundancia de información y la difusión rápida de contenido, los periodistas ahora deben enfrentar el reto de verificar información con mayor rigor”. 

Diez recomendaciones del Colegio Vasco de Periodistas para luchar contra los bulos

El Colegio Vasco de Periodistas se ha sumado a la lucha contra la desinformación y ha desarrollado un decálogo ―junto a la Diócesis de Bilbao―, para el uso ético de la IA en los medios de comunicación y tratar de asegurar el derecho a la información veraz.

  1. Confianza. La confianza es fundamental para que los medios adopten y utilicen la IA.
  2. Transparencia. Es importante ser transparente con la audiencia sobre el nivel de uso de la IA en la creación de contenidos.
  3. Atribución. Es fundamental mantener la supervisión humana en las decisiones editoriales importantes.
  4. Seguridad. Implementar medidas de ciberseguridad para proteger el uso de los sistemas de IA.
  5. Privacidad. Esforzarse por proteger al máximo la privacidad de la audiencia.
  6. Calidad. Usar la IA como apoyo para mejorar la calidad informativa y desarrollar herramientas de verificación.
  7. Formación. Promover la formación continua de los periodistas sobre la IA, sus capacidades y riesgos. Fomentar la colaboración con expertos para adaptarse de manera ágil y ética a los avances tecnológicos
  8. Monitorización. Supervisar y evaluar de forma continua los efectos del uso de la IA.
  9. Investigación. Respaldar la investigación y el debate independiente sobre el impacto del uso de la IA en los medios.
  10. Rendición de cuentas. Crear canales para que la audiencia pueda cuestionar el uso de la IA en los medios.

La llegada de la inteligencia artificial está transformando nuestra interacción con la información. Este fenómeno resalta la necesidad de los medios de comunicación de comprometerse con la realidad y la verificación de datos, con el fin de garantizar el derecho a la información veraz.