El ahogo de las empresas vascas por los costes energéticos va cobrando cada vez unos tintes más oscuros tras el estallido de la guerra de Ucrania. Es difícil encontrar ya algún sector que no esté afectado por el frenazo que está suponiendo en suministros y coste en el seno de la economía vasca. De ahí que el clamor por una rebaja urgente de los precios desde el Gobierno central que no espere hasta el día 29 vaya cobrando más fuerza. Este viernes por la mañana lo pedía Hiru con el combustible, el jueves lo solicitaba la consejera Tapia y este mediodía han sido las patronales las que han dado la voz de alarma mediante un comunicado remitido por Confebask con el aval de Cebek, Sea y Adegi.
En el escrito remitido por las patronales vascas, Confebask advierte de una situación que está empeorando "rápida y gravemente" y que está llegando a un punto "de muy complicado retorno" ante unos costes energéticos y de materias primas que se han disparado a niveles desconocidos desde el estallido de la guerra pero que ya eran "prácticamente insostenibles desde antes del estallido del conflicto". A eso se le ha sumado la huelga del transporte para formar un peligroso cóctel que, según la patronal "está amenazando seriamente la viabilidad de todos los sectores de actividad, de empresas de todo tipo y tamaño y de la economía vasca en general". De ahí que exista el riesgo de que "muchas empresas" se vean "obligadas a cerra en pocos días".
Ante esta grave situación Confebask ha solicitado a las administraciones que "adopten ya, sin esperar al día 29, las medidas necesarias para la reducción de los costes energéticos y el desbloqueo de la falta de suministros". La patronal pide que no se espere a la Cumbre Europea que se va a celebrar la semana que viene y recuerda que otros países europeos como Alemania, Francia o Italia ya han tomado cartas en el asunto. La "creciente falta de suministros" y la pérdida de facturación son las causas que mueven a la patronal a tomar medidas ya. Si no, Confebask es rotunda: habrá "consecuencias impredecibles y desconocidas para el tejido empresarial en Euskadi y para el empleo".
En el comunicado patronal, se afea al Gobierno el tope de la electricidad que se pretende fijar en los 180 euros por megavatio a la hora "porque ese precio sigue representando un coste inasumible para toda la industria, no sólo la electrointensiva". Confebask también apremia en el escrito remitido a que se llegue a un "acuerdo urgente" para desbloquear la huelga del transporte. Hay que actuar "con la máxima responsabilidad" recalca la patronal vasca.
Quinto día de colapso logístico
La situación en este quinto día del huelga en el transporte ha vuelto a dejar esta mañana la misma estampa en el Puerto de Bilbao. Las dársenas de Santurtzi, una de las principales vías de suministro para las empresas, siguen colapsadas. Allí el 95% de los transportistas son autónomos. Mientras, Mercedes ya ha anunciado esta semana un parón el próximo lunes que incluye el ERTE ante la falta de semiconductores. ArcelorMittal sigue parada hasta el día 23 y cientos de sectores siguen viviendo la misma situación: desde la aeronáutica hasta el sector primario pasando por las cadenas de supermercados o la logística. El adelanto de medidas por parte del Gobierno central podría resultar clave también para los alivios autonómicos, ya que pese a que el Gobierno vasco anunció que comunicaría qué ayudas ponía en marcha el próximo martes, el aplazamiento del anuncio de esas medidas buscaba ver qué acciones emprendían antes la Unión Europea y el Ejecutivo central.