LAB se desmarca de un pacto de rentas si no se avanza en una reforma fiscal

La coordinadora general de LAB, Garbiñe Aranburu, ha vuelto a reclamar un reparto "justo" de la riqueza "dignificando" salarios y "reformando la fiscalidad" y ha avisado de que el sindicato no estará en "ningún pacto de rentas que no suponga avanzar" hacia ese objetivo.

En una conferencia de prensa en Bilbao sobre los retos del sindicato para el nuevo curso, en el actual contexto "complicado" de crisis energética y alza de precios, Aranburu ha considerado que cuando el lehendakari, Iñigo Urkullu, propone la consecución de un pacto de rentas "habla" de que los trabajadores vascos, que desde 2011 han perdido una media de 6.000 euros de poder adquisitivo, según sus datos, sigan haciendo "un esfuerzo".

Según recoge Efe, ha reiterado, ante ello, que el sindicato no estará en "un acuerdo que suponga pérdida de poder adquisitivo para los trabajadores" y ha señalado que no se sentará en una mesa para lograr un pacto de rentas que trate exclusivamente de salarios. "Si vemos -ha indicado- que hay voluntad para abordar un debate total sobre los salarios y la fiscalidad, pero en clave de redistribución de la riqueza, lo analizaremos, pero no estamos en ese punto desgraciadamente".

Brecha salarial, salario mínimo y fin al reparto de dividendos

En materia salarial, LAB pide asegurar la capacidad adquisitiva de los salarios con subidas en función del IPC, demanda que está suponiendo uno de los principales motivos "de bloqueo" de la negociación colectiva por la "negativa" de la patronal, según Aranburu, que ha advertido a los empresarios de que la central "no cejará" en su empeño.

En el nuevo curso, LAB también defenderá acabar con la brecha salarial, establecer un salario mínimo de 1.400 euros y fijar "un salario máximo", así como prohibir el reparto de dividendos en las empresas en este contexto "tan especial". El sindicato reivindica, asimismo, una reforma fiscal integral "mucho más progresiva", al considerar que las medidas fiscales adoptadas en verano por los gobiernos constituyen "tiritas" que "no pueden tapar las hemorragias que desangran a los trabajadores".

Según ha dicho, la política fiscal "no puede estar diseñada para favorecer los intereses de los oligarcas vascos como Josu Jon Imaz, que se ha erigido últimamente en portavoz de los intereses de las grandes empresas". En su opinión, "hay margen de mejora para limitar las ganancias de las empresas energéticas, para gravar más a las rentas de capital y para aumentar los impuestos sobre las ganancias empresariales".