El Gobierno vasco propone que el Ejecutivo central le ceda el dinero no adjudicado en los PERTE

El consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, ha sido el encargado de abrir la presentación de los presupuestos de los distintos departamentos en el Parlamento vasco. El titular del departamento detrás de la creación de estas cuentas públicas ha comparecido este lunes para explicar el contexto en el que se han elaborado estas cuentas públicas y para presentar el presupuesto de su Departamento. Un presupuesto en el que, tal y como adelantó este domingo 'Crónica Vasca', el fondo Finkatuz ampliará su dotación hasta los 300 millones con una nueva inyección de 40 millones prevista para este ejercicio.

En un contexto económico en el que según Azpiazu todavía quedan "turbulencias" e "incertidumbres", el consejero ha mostrado su especial preocupación por la inflación. Azpiazu ha celebrado la bajada del IPC al 7,3% a nivel nacional según el dato adelantado del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondiente a octubre gracias a una moderación de los precios de la energía, aunque ha reconocido que será difícil dar el siguiente salto: bajar hasta el objetivo del 2%, algo en lo que influirán productos como los alimentos, de los que Azpiazu ha adelantado que pueden tardar unos ocho meses en moderar sus precios hasta esas tasas.

Sin embargo, Azpiazu sí que ha hecho público este miércoles su malestar, de nuevo, con la tramitación de los fondos europeos. Una cuestión que ya ha sido motivo de confrontación entre el PNV y el Gobierno central y sobre la que el Ejecutivo da ahora otro paso más: ahora la propuesta de Azpiazu es que sean los propios gobiernos autonómicos quienes gestionen directamente los recursos que no se adjudiquen en los PERTE.

Azpiazu, en concreto, se ha referido al PERTE de automoción, el primero de los adjudicados por el Gobierno central y que ha dejado en Euskadi 236 millones, lejos de las importantes cuantías que ambicionaban proyectos como Mercedes. En total, el Gobierno central ha adjudicado 877 millones de euros de los 3.000 con los que contaban presupuestados. Según el titular de Hacienda, "es cierto que los proyectos vascos tienen peso en esas adjudicaciones", pero "las pymes no están siendo capaces de acceder a las convocatorias de estos proyectos". Por eso, ahora la propuesta de Lakua es "que la cuantía no adjudicada de este PERTE pueda ser gestionada desde las CCAA directamente, de forma que podamos lanzar convocatorias más cercanas al terreno".

En cuanto a las cuentas propias de Hacienda, más allá de Finkatuz, el Gobierno ha dado a conocer que el Cluster Financiero de Euskadi anunciado a comienzos de curso por el lehendakari Urkullu estará creado en 2023 y qeu contará con la presencia de entidades bancarias, fondos de inversión, family offices, algunas EPSV y sociedades de garantía recíproca. Precisamente las nuevas cuentas volverán a dejar fuera más un incremento de las dotaciones para las EPSV públicas.

La parlamentaria Leire Pinedo, junto a Iker Casanova, en una rueda de prensa / Europa Press

"No está sabiendo leer el momento"

Por el momento, el guante tendido por el Gobierno para buscar consensos más amplios que la mayoría que sostiene al Gabinete Urkullu no parecen encontrar un caluroso recibimiento. El parlamentario de PP+Cs, Luis Gordillo, sí que ha dejado tendido la mano para poder buscar un acuerdo, aunque el pacto con los populares es el menos probable de las tres opciones con las que cuenta Lakua.

Desde Elkarrekin Podemos, David Soto ha insistido mucho en la necesidad de una reforma fiscal y en recurrir a más deuda. El endeudamiento es una cuestión que ha sido criticada en ambos sentidos: los grupos de la derecha han reprochado la idea de recurrir a ese dinero cuando las haciendas vascas han batido récord de recaudación y esperan volver a batirlo en 2023 mientras que los grupos de la izquierda han manifestado su descontento por no endeudarse más sin las reglas presupuestarias en vigor.

El partido más crítico con el Ejecutivo ha sido EH Bildu. Desde la coalición abertzale, la parlamentaria Leire Pinedo ha sido crítica con el presupuesto, que ha calificado de "conservador" y "continuista" cuando el momento exige cambios "estructurales" y "de paradigma". En línea con lo afirmado por Maddalen Iriarte en el pleno del pasado viernes, Pinedo ha reprochado que los presupuestos no son "ni valientes ni anticíclicos", sino "conservadores y continuistas". La coalición ha calificado los presupuestos "de escuadra y cartabón" y Pinedo le ha espetado a Azpiazu que "no está sabiendo leer el momento".

El titular de Hacienda ha replicado que no quiere "cerrar ninguna puerta", pero ha adelantado que las propuestas de Bildu podrán ser acogidas "sin reformas ni cambios estructurales que no quepan". En una semana, el próximo 9 de noviembre, será cuando el consejero Azpiazu empezará una primera ronda de contactos con los partidos.