Mercedes Vitoria / DAIMLER
Las tres amenazas de la automoción: un sector que supone el 35% del PIB industrial vasco
La crisis industrial que atraviesa Europa, el auge de la competencia asiática y los nuevos aranceles de Trump condicionan la competitividad de la industria vasca de la automoción
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La automoción tiene un gran peso de la industria vasca, con empresas de referencia como Michelin y Mercedes, pero también por una densa red de proveedores de componentes que refleja su gran peso económico que alcanza el 35% del PIB industrial vasco, es decir, más de un tercio del tejido industrial.
Esto es una gran fortaleza, pero durante los últimos meses también se ha visto como la crisis industrial europea y el crecimiento de la competencia asiática lo ha golpeado con fuerza. Un panorama internacional al que se le suman los aranceles de Trump aún previstos de anuncio el próximo 1 de agosto y que también pueden suponer una amenaza para el tejido industrial vasco: menores exportaciones y la posibilidad de ajustes en la producción como se viene viendo en los últimos meses con las paradas en la planta de Mercedes.
También puede provocar reajustes en un marco laboral, como ha ocurrido con Bridgestone. La planta de Basauri se encuentra ejecutando las 232 salidas pactadas en el ERE, medida que, por otro lado, y fruto de la negociación entre dirección y sindicatos, incluye un plan industrial para contrarrestar el impacto, plan que pasa por recibir las 100.000 nuevas cubiertas que el grupo japonés se adjudique, teniendo así prioridad frente a la planta polaca, que no ha sido castigada con despidos
Trabajador de Michelin
40.000 empleos en el sector de la automoción
El sector de automoción en el País Vasco cuenta actualmente con 740 plantas productivas y emplea a un total de 40.000 personas según los últimos datos anunciados por el consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, Mikel Jauregi.
"Somos uno de los territorios punteros en este sector industrial en Europa y tenemos mucho que decir en esta materia", aseguraba el propio consejero a finales de la semana pasada en la VI Jornada de Automoción del País Vasco.
En resumen, la automoción sigue siendo clave para la industria vasca, pero atraviesa un momento de incertidumbre. La presión internacional y los cambios en el mercado están afectando al sector, que trata de adaptarse rápidamente para no perder tejido industrial.