Vidrala aguanta el coste energético gracias a sus nuevos hornos y superará récords este año

La venta de envases de vidrio cogió fuerza en el último trimestre del pasado año y desde el mes de marzo está registrando un comportamiento "muy bueno" con niveles de ventas que se situan por encima de antes de la pandemia. Así lo han señalado portavoces de Vidrala a 'Crónica Vasca' que aseguran que con este ritmo mantienen los objetivos de producción y resultados para este 2021, a pesar del incremento de los costes que se está acusando también en este sector. Desde la compañía señalan que los nuevos hornos que están instalando ahorran entre un 10% y un 15%. Las previsiones para ventas en este 2021 anotan más de 1.000 millones de ventas y un ebitda (beneficios antes de impuestos) de unos 290 millones. Se trata de cifras históricas en la compañía y que los analistas de los mercados creen que subirán algo más incluso. 

El segundo trimestre de este año con la superación de las restricciones anotó un gran incremento de actividad en las ocho plantas que tiene Vidrala en Álava, Albacete, Cataluña, Portugal, Inglaterra, Italia e Irlanda. Las ventas se incrementaron un 27% con 294 millones respecto al año pasado. Su producción de envases se reparte de un modo estimado en condiciones normales con un 55% al sector de hostelería y un 30% al canal retail. Así que la reactivación del consumo, la normalización y el comportamiento de hoteles y restaurantes este verano también es signo de buen augurio. Por lo que Vidrala se mantiene como un contrapunto para el sufrido tejido industrial de Ayala, esa zona norte de Álava que acoge también a empresas como Tubacex, con una huelga que supera los 200 días, o Tubos Reunidos que ha necesitado del rescate de la SEPI y comienza ahora su reestructuración.

Cifras récord para 2021 e incertidumbre para 2022 

Las previsiones de los analistas para Vidrala, y que fuentes de la compañía han confirmado a 'Crónica Vasca',  contemplan alcanzar este año unos resultados récord para la compañía de la familia Delclaux. Así, las ventas para 2021 se estiman en más de 1.000 millones con la posibilidad de mejorar los 1.010 millones de euros de 2019. En cuanto al beneficio antes de impuestos (ebitda) se establece en unos 290 millones de euros que supondrían multiplicar por 1,7 los obtenidos hace tan solo cinco años. 

Los costes de suministro, especialmente el energético, se están notando, pero según explican desde la compañía en este ejercicio no van a afectar a las previsiones. "La demanda continúa sólida y las tendencias estructurales parecen favorables, si bien las condiciones reales a corto plazo dependerán inevitablemente de la evolución de la pandemia". Sobre como será el 2022, la compañía señala que esa es la gran pregunta para la que habrá analizar el impacto de estos costes en los mercados y en los precios con los clientes.