El fondo EQT cierra la compra de Solarpack una semana antes de que venza el plazo de la OPA
Los accionistas de la empresa impulsada por la familia Galíndez que han vendido su participación ya han alcanzado el 75% de las acciones que se había establecido como condición para la compra de la compañía
13 noviembre, 2021 05:00Todavía queda hasta el viernes de la próxima semana para que expire el plazo que tienen los accionistas de Solarpack para vender sus participaciones a EQT. El fondo de inversión sueco lanzó una OPA por la compañía por más de 800 millones que, tras la aprobación de la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), expira el 19 de noviembre. Una de las condiciones de la operación es que fuera aceptada, al menos, por el 75% de los accionistas y que estos vendieran su parte por los 26,5 euros por acción ofertados, lo que supone una prima del 45% sobre el precio último al que cotizó la compañía. Se trata de una condición que, según han confirmado fuentes conocedoras del proceso a 'Crónica Vasca', ya se ha dado. Y es que la acogida de los accionistas a la OPA está siendo muy favorable, "hasta rayar la unanimidad".
La operación ya venía avalada por el propio consejo de administración de Solarpack que, recientemente y tras la publicación del nuevo folleto hace unas semanas, respaldó la operación. Los principales accionistas de la entidad que ostentan más del 50% de la empresa, la familia Galíndez, Pablo Burgos y la sociedad Onchena de la familia Ybarra Careaga, ya aceptaron la oferta. El resto de pequeños accionistas se han ido sumando al proceso que, lejos de convertirse en una operación especulativa, alumbra un fortalecimiento del proyecto que se nutre de una fuerte financiación para afrontar los retos de crecimiento que exige el sector fotovoltaico.
Los nuevos propietarios no han recurrido a ninguna entidad para financiar la operación, ni tampoco a un endeudamiento de Solarpack, sino que financiacian el 100% de la compra con recursos propios en una operación asesorada por Credit Suisse y Clifford Chance. La obtención de estos recursos facilita la ejecución de las importantes inversiones que son necesarias para afrontar el desarrollo de instalaciones fotovoltaicas de hasta 8 GW hasta 2026 que exigirán entre 1.500 y 2.000 millones de euros. Una situación que había hecho que la compañía no hubiera repartido dividendos hasta ahora, ya que están concentrados en la reinversión que necesitaba el negocio. El banco Santander es la entidad que opera recoger las suscripciones de venta de los accionistas que ya han firmado en el porcentaje mínimo del 75% que fijo EQT para seguir adelante con la operación.
Mantenimiento de la sede y de los fundadores
Según informaba 'Crónica Vasca', las intenciones del grupo EQT son seguir impulsando el desarrollo de la empresa preparando un nuevo plan estratégico con el actual cuadro de directivos y estableciendo a Solarpack como el vehículo para canalizar cualquier compra o inversión en el sector fotovoltaico que afronte el fondo sueco. La nueva sociedad que surgirá de la compra, seguirá contando con dos de sus fundadores, José Galíndez y el actual consejero delegado, Pablo Burgos, que ostentarán un 5% y un 3% respectivamente de la empresa, además de dos puestos en el consejo de administración con el derecho a veto de determinadas decisiones. EQT señala que "no hay intención de cambiar los centros de actividad durante los próximos 12 meses" y, también, el compromiso de mantener el empleo y las condiciones laborales por el mismo plazo de tiempo. La continuidad de Pablo Burgos como consejero delegado es una de las condiciones planteadas por los suecos.
Entre las primeras decisiones del guión está la de sacar de cotización en Bolsa a Solarpack y mantener el suspenso en el reparto de dividendos. La compañía con sede en Getxo tiene actualmente en funcionamiento parques solares con una potencia de 500 MW y confía en terminar el año con un 1GW de instalación. El objetivo es duplicar esa capacidad en 2023 para llegar a 2 GW y elevar la potencia instalada hasta los 4GW en 2026.