Las empresas guipuzcoanas moderan sus expectativas de crecimiento para 2022 con respecto a 2021

Con distintas perspectivas empresariales según el sector, la Cámara de Gipuzkoa ha presentado este martes su informe de coyuntura económica y perspectivas de cara a 2022. Según la agrupación guipuzcoana el PIB crecerá entre un 4,5% y un 6% a lo largo de 2022: una horquilla relativamente amplia, pero en cualquier caso inferior al aumento del 6,7% que pronostica el Gobierno vasco para este año. Las empresas guipuzcoanas creen menos en una retroceso en su volumen de negocio, pero también decrecen los que creen en un año de crecimiento: el año pasado eran el 56% y ahora ya sólo son el 51%; la otra mitad de los empresarios auguran estabilidad o directamente retroceso económico.

Este 2022, por tanto, también será de recuperación para las empresas del territorio, pero con percepciones distintas según el sector económico de acuerdo con la organización cameral. Así, según la Cámara de Gipuzkoa, el comercio es el sector más esperanzado en un crecimiento de su volumen de negocio, donde crece un 14% los empresarios que creen que el 2022 va a ser un año de crecimiento. En cambio, en la construcción y la industria las percepciones han empeorado con respecto a 2021: son menos los fabricantes que creen en un 2022 de crecimiento con respecto al año anterior y tres de cada cuatro constructores auguran un escenario de estabilidad frente al 95% que el año pasado esperaban un crecimiento en su negocio.

El caso de la construcción es particularmente llamativo: las constructoras guipuzcoanas, de hecho, prevén reducir su inversión en 2022 mucho más que en 2021. Entonces era sólo un 11% de los empresarios quienes esperaban invertir menos en construir... y ahora son un 46% los constructores que esperaban gastar menos dinero que el año pasado. Algo que coincide con un momento en el que las empresas de Bizkaia han reconocido a 'Crónica Vasca' su preocupación por la alta demanda de vivienda. Aun así, las constructoras sí que prevén crear más empleo que el año pasado, algo que es común a toda la economía de ese territorio según la Cámara de Gipuzkoa.

Las previsiones de crecimiento son más bajas que las del Gobierno vasco y la Cámara explica que los fondos europeos, la recuperación de lo perdido por la pandemia y el impulso de los mercados internacionales invitan a pensar en una recuperación fuerte. Sin embargo, en el horizonte la organización guipuzcoana reconoce su preocupación por los altos costos de la energía, la inflación, una hipotética subida de los tipos de interés y una normalización de las cadenas de suministro.