El Gobierno remodelará el Instituto Vasco dedicado a financiar o salvar empresas

El Gobierno vasco ha aprobado este martes el proyecto de Ley del Instituto Vasco de Finanzas, que dotará a la institución vasca una nueva regulación "adaptada a la nueva realidad económica y normativa" de Euskadi, que definirá su papel como instrumento de la política financiera y de crédito público del Gobierno autonómico. El Instituto Vasco de Finanzas está concebido para respaldar a empresas clave con dinero público a través de fondos como Finkatuz.

Según informa la Agencia EFE, el principal objetivo de esta norma es definir su ámbito de actuación, funciones, organización y régimen jurídico para consolidar su labor de gestión de los instrumentos de financiación pública. Fue creado en diciembre de 2007 para reordenar la política financiera y de crédito público de la Administración Pública de Euskadi. Inició su actividad en enero de 2009 y fue a partir de 2013 cuando el Gobierno vasco reforzó su papel como gestor de los instrumentos de financiación pública.

Ya en julio de 2018 se presentó el proyecto de racionalización de los instrumentos financieros públicos para una nueva ordenación de la política del Gobierno vasco en este ámbito, que fue el germen de este proyecto de Ley aprobado este martes. También se activaron nuevos instrumentos de financiación ligados a capital para contribuir al crecimiento y consolidación de las empresas en Euskadi.

Este proyecto de ley establece un marco organizativo para ordenar los tres tipos de instrumentos de intervención -capital, garantía y préstamo- en función de las necesidades de las empresas, según su tamaño y fase de desarrollo. Con la implantación del nuevo modelo, el Instituto Vasco de Finanzas está llamado a promover e implementar una actividad financiera a través de una triple actuación.

Por un lado, gestionar las participaciones financieras del Gobierno vasco en los diversos fondos y sociedades de carácter financiero; por otro gestionar los instrumentos financieros necesarios ligados a políticas sectoriales del Ejecutivo; y en tercer lugar concentrar su actividad crediticia en operaciones específicas, siguiendo estrategias de coinversión con las entidades financieras.

Por ello, según el Ejecutivo vasco, dado el peso específico en materia de financiación pública que tiene la entidad, era necesario contar con una normativa reguladora adaptada a la nueva realidad económica y normativa de Euskadi, así como al papel que debe asumir como instrumento de la política financiera y de crédito público.

El proyecto de ley define la naturaleza y régimen jurídico del Instituto Vasco de Finanzas, los fines y principios de actuación y sus funciones, sus órganos de gobierno y la estructura orgánica, los estatutos que desarrollarán las funciones, composición y su régimen de funcionamiento o de personal. Tras ser aprobado este martes, el proyecto de Ley se remitirá al Parlamento vasco para su tramitación.