Planta de Michelin Vitoria

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Empresas

La gripe industrial en Alemania y Francia amarga el fin de año a Michelin y Bridgestone

Las fábricas vascas de neumáticos sufren las consecuencias de un otoño gris para la automoción europea que amenaza con prolongarse en 2024 

23 noviembre, 2023 05:00

Las dos principales multinacionales de neumáticos en Euskadi, Michelin y Bridgestone, han anunciado medidas para ajustar la producción al no poder cumplir las expectativas marcadas en la primera mitad del año. La principal fábrica de la firma francesa, la de Vitoria, atravesó el verano con ritmo alegre, mejor de lo esperado, pero el otoño vuelve a poner sobre el tapete todas las incógnitas que rodean a la automoción en Europa. Peor es la coyuntura para Bridgestone Basauri, que ha desbordado la flexibilidad pactada en convenio y se ve forzada a recurrir al ERTE.

Ambos fabricantes de ruedas, con cerca de 5.000 trabajadores en Euskadi (Michelin tiene también planta en Lasarte y Bridgestone un pequeño almacén anexo a Basuri en Usansolo), han sido durante el año uno de los pilares de las exportaciones. Si las ventas totales de las empresas vascas no han llegado a hundirse ha sido en gran parte por el buen ritmo exportador de los neumáticos, una de las grandes partidas en el escaparate comercial de Euskadi junto a los vehículos de Mercedes, los componentes para automoción y el combustible de Petronor.

En septiembre y octubre sin embargo la radiografía ha sido otra y, en especial, se teme una recta final de 2023 muy parada para la automoción europea. Francia y Alemania, los grandes tractores del sector y que concentran gran parte de la producción de neumático en Euskadi, han dado muestras de debilidad este otoño. La industria germana no levanta cabeza desde primavera y el último dato de septiembre, con una bajada anual de más del 4%, es especialmente malo.

La principal potencia europea ya vivió al filo de la recesión la bisagra de final de 2022 e inicio de 2023, aunque finalmente logró anotar unas décimas de avance del PIB en los primeros meses del año. Con el motor industrial gripado a partir del verano los fantasmas de la recesión regresan y la previsión oficial de Berlín ya apunta a una caída de la economía a final de año con una recuperación débil en 2024.

La alemana Continental ha anunciado despidos en su división de automoción / EP

La alemana Continental ha anunciado despidos en su división de automoción / EP

El aviso de Continental

El enésimo parón de la automoción afecta a toda la cadena. El gigante alemán Continental anunciaba hace unos días una reducción de miles de empleos en todo el mundo para poder ahorrar 400 millones de euros a partir de 2025, una seria advertencia teniendo en cuenta el peso que tiene el grupo en el sector.

Por otro lado, en Francia la evolución industrial ha sido algo más amable en los últimos tiempos y, aunque comparativamente las cifras son más suaves que en otras potencias, los datos de apertura del otoño también preocupan. La industria francesa no creció nada (0%) en septiembre en relación al mismo mes de 2022 aunque en la comparativa con agosto la actividad bajó un 2%. En torno a la mitad de todos los neumáticos producidos en Euskadi y vendidos fuera de España van a parar a vehículos alemanes y franceses, algo más a estos últimos.

Oficinas de la planta de Bridgestone en Basauri. / EP

Oficinas de la planta de Bridgestone en Basauri. / EP

Bridgestone Basauri, hasta octubre

Si Michelin Vitoria tiene margen para ajustar calendarios en estas últimas semanas del año para acoplarse a la demanda, en el caso de la planta vizcaína de Bridgestone los 20 días de flexibilidad ya se han consumido, por lo que se pone en marcha la maquinaria del ERTE. La fábrica de Basauri, con casi 900 operarios y una producción destinada principalmente al mercado europeo, estará afectada desde el 17 al 30 de diciembre, y además se plantean en principio otros 63 días más de regulación hasta octubre de 2024.

Los detalles del expediente están por negociar con la parte social, aunque en este caso la medida tiene un calado que lleva a la preocupación. La multinacional japonesa ya puso en 2022 un ERTE en la mesa a estas alturas del año, pero finalmente la afección fue limitada. El planteamiento de la compañía ahora invita a pensar en un próximo ejercicio muy complicado para el sector aunque, eso sí, habrá revisiones constantes del expediente si la demanda mejora.

Y eso después de que no se hayan cumplido las previsiones de mejoría trazadas por Bridgestone en el arranque de 2023, que finalmente apunta a una caída de la producción en Basauri de en torno al 15% respecto a 2022. Una caída curiosamente parecida a la que estimaba inicialmente Michelin para Vitoria este año. El paso de los meses animó a la dirección de la planta a maquillar esa caída para de nuevo en otoño volver a 'podar' números.