Este viernes el comité intercentros de CAF y su dirección se reunirán de nuevo, tras la negativa de esta última a contemplar las propuestas ofrecidas por los sindicatos, las de CCOO y ELA las más recientes. Lo hacen como broche final a la primera fase de movilizaciones acordadas en asamblea a principios de noviembre, y con la sombra de nuevos paros y huelgas, una incluso indefinida, en caso de que los responsables de la fabricante de trenes no den un paso al frente.
El pasado miércoles se daba por finalizada esta primera ronda con una “exitosa”, según la parte sindical, jornada de paros por horas en las plantas de Beasain, Irun y Castejón de Navarra, y se anunciaba a la plantilla la existencia de una nueva reunión negociadora este viernes entre comité intercentros y la empresa presidida por Andrés Arizkorreta.
Llega un nuevo encuentro, que coincide además con la publicación del segundo calendario de movilizaciones, presentado por el sindicato LAB -primera fuerza sindical en los comités de Beasain e Irun-. Este, según han informado los sindicatos, incluye paros parciales diarios de tres horas para la semana del próximo 11 de diciembre, huelgas de jornadas completas para los días 18, 19 y 20 de ese mismo mes y huelga indefinida a partir del 8 de enero.
Requisitos como el teletrabajo, antes del acuerdo
Entre las propuestas de los sindicatos están eliminar la comisión de flexibilidad, asegurar el retiro de las personas veteranas, más empleo en talleres y delineación, mejoras salariales, la incorporación de TRENASA -la planta de Castejón-, pasos “firmes” en el camino del calendario laboral de 1592 horas para todos, la incorporación de diferentes compañeros subcontratados y mejoras en el teletrabajo. Contenidos que vienen reclamando los en torno a 2.800 trabajadores que forman parte de esta compañía en Euskadi desde hace meses.
Por ello piden a la dirección de la misma “que se siente a la mesa con voluntad negociadora, para que avance en la negociación, no bloquee las posibilidades de acuerdo y no nos aboque a un escenario de movilizaciones y huelgas”, avisan desde LAB.
Se apoyan, dicen, en los más de “13.000.000.000 millones que existen en la cartera de pedidos de CAF”, y es que la empresa ha obtenido un beneficio neto de 53 millones de euros en los nueve primeros meses de este año, lo que supone un incremento del 56% respecto al mismo periodo del año anterior; monto de dinero que según estos, deberían servir para “impulsar la creación de empleo de calidad o para mejorar las condiciones de los trabajadores”, temas “cruciales” que los sindicatos no están dispuestos a abandonar y sin los que estos no estarían por la labor de llegar a un acuerdo.