Los Delclaux dan un paso clave para comprar Microdeco al aprobar la plantilla el convenio

La vía Delclaux gana enteros en Microdeco después de que la plantilla de la compañía de Ermua, dedicada a la fabricación de piezas para automoción, haya avalado la propuesta de convenio que propone la familia de empresarios a través de Tekpolio. Como adelantó Crónica Vasca, los Delclaux mostraron hace tiempo su interés en asumir las riendas de la empresa, que atraviesa una muy delicada situación económica, y están cerca de conseguirlo.

La aprobación este jueves por la plantilla de la hoja de ruta a nivel laboral planteada por los nuevos inversores es un paso vital para que la oferta de compra se materialice, tal y como remarcan fuentes conocedoras del proceso. De hecho la votación favorable en la asamblea supone el fin de la huelga iniciada hace unas semanas por el comité y, de algún modo, la aceptación de la propuesta del que muy probablemente será nuevo socio de Microdeco. La rebaja de la tensión laboral supone la apertura de un escenario mucho más cómodo para la entrada del inversor.

La firma de Ermua, que pasaría a llamarse Microdeco Berria, ha vivido unos años muy delicados tras entrar en concurso de acreedores en 2021 con una deuda de algo más de 20 millones de euros. Si finalmente se confirma la entrada de Tekpolio el proceso concursal concluiría en el inicio de 2024 tras más de dos años de incertidumbre en los que, a cambio de mantener a flote la compañía, la administración concursal ha ido acometiendo importantes ajustes.

La radiografía actual es muy diferente a la que había cuando comenzó el concurso (la plantilla queda en algo más de medio centenar de trabajadores) aunque la buena noticia es que Microdeco continuará con la actividad industrial y siempre podrá recuperar tamaño si la demanda acompaña. La marca lleva asociada una buena reputación en el sector y cuenta con clientes consolidados tanto en Europa como en Turquía, China, India, México o Estados Unidos.

Movilización de Microdeco, Glavista y Mecaner / X

Nuevo convenio

La aprobación del nuevo convenio, que incluye reducciones salariales los primeros años, era el fleco que quedaba pendiente para que la oferta de Tekpolio recibiese un impulso. Ya antes ha habido otros inversores que han estado muy cerca de comprar la compañía, pero por una razón o por otra finalmente las operaciones no terminaron de cuajar. La más avanzada, la del grupo de inversión PHI, cayó precisamente por desavenencias con los representantes de los trabajadores.

Ahora sí, todo apunta a que los Delclaux tienen muy cerca hacerse con el control de la firma, que una vez encarrilada su situación financiera presenta mimbres como para, con una buena gestión, recuperar el hueco preferente que tuvo en el mercado de la automoción. Uno de sus atractivos es precisamente su presencia internacional (tiene plantas en México y Rumanía), que ofrece un gran potencial a la hora de recuperar tamaño.

Exterior de las instalaciones de la empresa Microdeco ubicada en Ermua / CV

En cuanto a Tekpolio se trata de la gran apuesta a nivel tecnológico de la familia Delclaux-Lezama Leguizamón. El brazo inversor de la familia de origen belga ha realizado varias adquisiciones como la catalana Deale (una plataforma online para poner en contacto a empresas e inversores) o la ingeniería Irontec, muestra de la ambición que hay detrás del proyecto.

Tekpolio incluso ha hecho una inversión de 8 millones en la fábrica de electrolizadores de H2B2 en Sevilla sumándose al prometedor negocio del hidrógeno limpio. En el caso de Microdeco abre una puerta en una actividad más tradicional, aunque con recorrido partiendo de las posibilidades que da una maquinaria y sistemas de trabajo (se fabrican piezas pequeñas que requieren cortes de alta precisión) punteros a nivel tecnológico.