Desde que Solarpack dio el salto a la India en 2015, ha ido poco a poco consolidando su presencia en el país. Tanto es así que, para 2025, una década después de su expansión india, la empresa vasca prevé alcanzar una cartera de un gigavatio de capacidad con la próxima entrada en funcionamiento de su octava planta solar fotovoltaica en dicho destino, mientras siguen dando pasos para la construcción del parque Gorbea Solar, que contará con 450 megavatios (MW) de potencia.
Hace unos días, la filial del fondo sueco EQT resultaba adjudicataria de un nuevo contrato de suministro de energía (PPA, por sus siglas en inglés) a largo plazo, que posibilitará a la compañía la producción de 300 MW más con la construcción de Anboto Solar, una nueva planta solar fotovoltaica que estará ubicada en el Estado de Rajastán.
La operación implica la firma de un contrato de 25 de años de duración con NTPC, la principal compañía energética del país. Hay que destacar que Solarpack logró el precio más bajo licitado en la subasta, de 0,0312 dólares/kWh, donde se sacaron a concurso un total de 1.500 MW que se repartieron así: 500 MW para Avaada Energy; 400 MW para Renew Solar Power; 300 MW para Apraava Energ (300 MW) y los 300 MW restantes para Solarpack.
Capacidad mundial
A partir de la puesta en marcha de Anboto Solar, prevista para finales de 2025, esta nueva planta generará alrededor de 872 gigavatios por hora (GWh) al año. Este contrato representa "un ejemplo de la capacidad de la compañía para realizar grandes proyectos a escala mundial", tal y como ha celebrado el consejero delegado de Solarpack, Leo Moreno.
"Estamos muy orgullosos de ayudar a que India reduzca sus emisiones de carbono y de fomentar su desarrollo socioeconómico del país con la creación de empleo y beneficios sociales", ha concluido Moreno.
De la OPA fallida con Iberdrola a la del fondo EQT
Ya es pasado cuando en noviembre de 2020, Iberdrola mostró interés en adquirir Solarpack a cambio de 600 millones aproximadamente. Una OPA (Oferta Pública de Adquisición) que finalmente decidió cancelar debido precisamente a su elevada exposición en el mercado exterior, principalmente en Chile, India, Perú y Uruguay.
En ese momento, la compañía originaria de Getxo, fundada en 2005 por José María Galíndez y Pablo Burgos, que controlaban entonces en torno al 60% del capital, ya contaba con el 60% de su producción en el extranjero.
No hubo que esperar mucho para que Solarpack encontrase otro pretendiente. Poco más de medio año después, en junio de 2021, el fondo sueco EQT lanzaba una OPA para controlar la compañía, aumentando su valor hasta los 881 millones de euros.