La generación de energía eólica procedente del mar sigue escalando posiciones en España, aunque aún sigue siendo incipiente, especialmente en Euskadi, donde las características de la costa vasca, bañada por el mar Cantábrico, hacen más difícil la instalación de aerogeneradores a grandes profundidas que resistan los fuertes vaivenes de las olas.
Es por eso que otras comunidades autónomas costeras, como Galicia, Canarias o Cataluña, están ganando posiciones en este mercado. Principalmente es la costa gallega la que está liderando esta nueva industria, donde se entrecruzan grandes promotores a nivel internacional que han encontrado en sus aguas un entorno idóneo para poner en marcha sus iniciativas.
Ejemplo de ello es la ingeniería vasca Saitec, que hace un año solicitaba permiso, a través de su sociedad Candieira Offshore Wind, para construir una planta de prefabricación y montaje de plataformas flotantes de eólica marina en el Puerto Exterior de A Coruña.
O el Grupo Amper, quien, a través de su filial Nervión Naval Offshore, especialista en diseño y construcción de plataformas para eólica marina, ha diseñado un plan de expansión en el Golfo Ártabro, concretamente en los puertos de Ferrol y de A Coruña.
Así, Nervión Naval Offshore ha invertido 10 millones de euros para la adquisición y equipación de las instalaciones que hasta ahora ocupaba Siemens Gamesa en As Somozas, donde además de fabricar componentes para eólica marina producirán también velas rígidas.
De forma paralela, la compañía vasca está en proceso de construcción de su nueva factoría para eólica marina en el puerto exterior de Ferrol, donde ha resultado adjudicataria de una parcela de 70.000 metros cuadrados durante 30 años. En este proyecto, que espera entrar en funcionamiento al 100% a principios del próximo año, invertirá 30 millones de euros. Además, Nervión Naval Offshore ha solicitado a la Autoridad Portuaria de A Coruña la concesión de 40.000 metros cuadrados para abrir las puertas de otro centro productivo en dicho puerto.
Invernergy Services, un nuevo actor en la eólica marina en España
La última en apostar la eólica offshore ha sido Invenergy Services, filial del grupo estadounidense Invenergy, que gestiona y opera más de 31 GW en más de 200 instalaciones de generación renovable y almacenamiento a gran escala, tanto propias como de terceros, en todo el mundo.
Desde la adquisición de la gestora de parques eólicos HUSO a finales de 2022, Invenergy Services opera en Galicia, donde cuenta con más de 250 profesionales entre As Somozas y As Pontes para la construcción, operación y mantenimiento de parques eólicos terrestres para terceros. Ahora, ha mostrado su deseo de entrar en el negocio de la eólica marina en España con un ambicioso proyecto, 'O Boi'.
Con él, el gigante con sede principal en Chicago quiere instalarse en la costa de A Coruña, en Nor-2, una de las zonas señaladas por el Gobierno central por su alto potencial para el desarrollo de la energía eólica marina por ser fuerte en recursos eólicos.
Este parque offshore, que dispondría de 552 MW, tendría capacidad para producir el 15% de toda la demanda eléctrica de la comunidad gallega, situaría sus aerogeneradores flotantes a una distancia de entre 45,7 y 60 kilómetros de la costa, una franja aún no explorada debido a las dificultades técnicas añadidas que presentan las profundidades marinas.
El grupo Invernergy, que ha mostrado su intención de dar prioridad a los fabricantes de origen local, ha presentado ya el DIP, el Documento Inicial del Proyecto, que se encuentra ahora en fase de análisis por parte del Ministerio de Transición Ecológica, si bien la puesta en marcha de este tipo de proyectos puede demorarse entre 8 y 10 años hasta pasar todos los trámites exigidos.