Arteche triunfa en Bolsa por la 'fiebre' renovable y eleva su valor un 50% hasta 350 millones

2024 va camino de ser el año de Arteche. El fabricante de equipos eléctricos es a estas alturas la cotizada vasca con mejor evolución y una de las firmas que mejores sensaciones transmite a los analistas con una revalorización acumulada en los ocho primeros meses del año del 55%. La empresa de origen familiar acaba de lanzar además un nuevo plan estratégico con inversiones millonarias para crecer sobre todo en Estados Unidos.

Como les sucede a otras compañías vinculadas al desarrollo y actualización de redes eléctricas, en algunos casos proveedores de cabecera de las grandes energéticas, las urgencias por el cambio de modelo hacia las renovables en medio mundo impulsan la carga de trabajo de Arteche. El grupo con sede en Mungia anotó cifras récord de ventas y beneficios el año pasado con todas sus plantas a pleno rendimiento. Sus grandes mercados son, además de Estados Unidos, España, Brasil y México.

Precisamente el mercado norteamericano será clave en el próximo salto adelante de la compañía que encabeza Alex Arteche, cabeza visible de la familia de fundadores del proyecto que controla a día de hoy más de la mitad de la propiedad. En cuanto al resto de la compañía se la reparten con un 20% ECN Cable, de Dámaso Quintana, Gobierno vasco a través de su sociedad de capital riesgo y Onchena (familia Ybarra Careaga) con un 6% en cada caso (queda libre un 15% de free float).

El propio presidente y CEO explicaba en la presentación de la hoja de ruta hasta 2026, cuando se espera superar la cota de 500 millones de euros en facturación, que el mercado norteamericano será "la clave" para sostener los ingresos por las inversiones previstas para la actualización de la infraestructura eléctrica y su adecuación al despliegue renovable. Nada que no esté en marcha ya en Europa pero a otra velocidad.

Un operario realizando trabajos en Arteche. / CV

Remontada y despegue

Y como la Bolsa no premia tanto lo que has hecho sino lo que vas a hacer, la puesta de largo de ese plan a tres años ha sido el empujón final para que Arteche despegue definitivamente en el parqué tres años después de tocar la campana. La salida a Bolsa a las puertas del verano de 2021, una de las últimas 'campanadas' de una empresa vasca (recientemente hacía lo propio Virtualware pero optaba por la red Euronext y en concreto París) tenía por objetivo precisamente obtener el respaldo económico necesario para crecer y convertirse en un jugador clave en la transición energética.

Lo cierto es que los primeros pasos en el BMW Growth no fueron demasiado fluidos pero ya en la segunda mitad de 2022 inició la remontada para equiparar el valor de su estreno, que fueron 225 millones de euros, para el verano de 2023. Para entonces la firma vizcaína, con cerca de 3.000 trabajadores, ya había cosechado nuevos pedidos clave y había dado un par de mordiscos al mercado a nivel inorgánico con las compras de Esitas o SDO, reforzando así su posición en Turquía o Australia.

Junta de Accionistas de Arteche en Mungia (Bizkaia). / Arteche

Y tras el 'empate' ha llegado la fuerte subida de 2024, un año de consagración con un repunte que coloca al grupo de Mungia entre las cotizadas con mejor proyección de los mercados españoles. Con su precio actual, algo más de 6 euros por acción, el valor del fabricante de equipos eléctricos rondaría un valor total en torno a 350 millones de euros, lo que supone un crecimiento de más del 50% respecto al estreno en Bolsa hace tres años.

En lo que va de año Arteche logra el mejor resultado entre las cotizadas vascas más que duplicando las también fuertes subidas, alrededor de un 26%, de la promotora Neinor y del grupo Vocento.