Imagen de las instalaciones de Petronor / X

Imagen de las instalaciones de Petronor / X

Empresas

Petronor compra más de dos tercios del petróleo a países americanos tras el veto a Rusia

La importación de crudo de la refinería de Repsol crece un 9% en lo que va de año y apunta a un nuevo máximo desde 2018

24 septiembre, 2024 05:00

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La economía vasca no sería la misma sin Petronor. La refinería de Muskiz es uno de los ejes económicos, sociales y tributarios de Bizkaia y su papel es crucial en casi todas las estadísticas industriales de la provincia y de la comunidad autónoma.

Su buen nivel de actividad este año está evitando el hundimiento del volumen total de exportaciones de Euskadi, lastradas por la crisis de la automoción europea y por una cierta pérdida de 'punch' de las empresas siderúrgicas en su transición particular hacia productos bajos en emisiones.

No deja de ser significativo que en un momento en el que la descarbonización ocupa agendas políticas y empresariales al máximo nivel el mercado siga transmitiendo un gran apetito por los combustibles de origen fósil. De hecho el negocio de Petronor está aquí mismo, en Europa, con potencias como Reino Unido o Francia tirando de las ventas.

Es en ese contexto en el que se enmarca esa petición de calma a la hora de legislar por parte de las grandes energéticas, entre ellas Repsol, impulsora pese a todo de grandes inversiones ligadas a renovables, biocombustibles o hidrógeno verde, este último llamado jugar un papel central en la propia Petronor a medio plazo.

Pero es un hecho que, al menos a día de hoy, gasolina y diésel se siguen vendiendo. Para muestra un botón: solo en julio la exportación de combustibles de la refinería de Emiliano López Atxurra casi se duplicó respecto a ese mes de 2023 con un incremento en los siete primeros meses del año de más del 32%.

Emiliano López Atxurra y Josu Jon Imaz conversan en Petronor

Emiliano López Atxurra y Josu Jon Imaz conversan en Petronor

Récord de compras

Aumenta la venta de carburantes de Petronor y, en el otro lado de la cadena, crecen las compras de materia prima. No es una relación directa porque no todo el crudo que entra en las instalaciones próximas al Puerto de Bilbao se acaba convirtiendo en gasolina y gasóleo.

En los siete primeros meses del año las toneladas totales han aumentado un 9% respecto al mismo tramo de 2023, hasta 5,8 millones de toneladas, lo que supone superar también el pico de 2022 (5,48 millones hasta julio).

Electrolizador de 2,5 MW de potencia puesto en marcha por Petronor en Muskiz.

Electrolizador de 2,5 MW de potencia puesto en marcha por Petronor en Muskiz. Petronor

De continuar a este ritmo la refinería superará a cierre del año el listón simbólico de 10 millones de toneladas de petróleo, un volumen relevante aunque lejano a las entradas de materia prima totales en los años previos a la pandemia, con 2018 marcando el techo por encima de los 11 millones de toneladas (casi 7 millones en el tramo enero-julio).

Por ese vínculo refinería-puerto, ese año 2018 ostenta a día de hoy el récord de tráficos totales del Puerto de Bilbao con 35,6 millones de toneladas, un umbral impulsado precisamente por esa actividad de Petronor y que se antoja algo lejano a día de hoy (algo menos de 33 millones de toneladas en 2023).

Instalaciones de Petronor / X

Instalaciones de Petronor / X

Cierre del grifo ruso

Ese crecimiento del crudo que llega en barco a Muskiz se produce a pesar del fin progresivo de las compras a Rusia determinado por la refinería en 2022 a causa de la guerra con Ucrania. Petronor mantiene un abanico amplio de países suministradores por lo que compensar ese veto a Moscú no ha sido complicado.

El mayor peso en la balanza recae este año en el continente americano, que concentra casi el 70% (4 millones de toneladas) de todas las adquisiciones hasta julio. Sobresalen Brasil y México, que suman 2,5 millones de toneladas, pero hacen una aportación importante también Guyana y Venezuela, con medio millón cada uno, y en menor medida Canadá.

En cuanto al resto de vendedores, la firma de López Atxurra tira de África, con Angola y Nigeria a la cabeza, y en menor medida de Asia (Kazajistán e Irak) y del crudo que aun aportan los mares del norte de Europa (Noruega/Reino Unido).