
Oroi es una startup guipuzcoana de realidad virtual / X
Nueva aventura para el principal fondo a través del que actualmente invierten las EPSV, en concreto Elkarkidetza y la guipuzcoana Geroa, en el capital de empresas. Se trata del fondo Orza, que se va hasta las 28 participadas tras invertir en la startup de realidad vitual Oroi.
Se trata de una pequeña empresa guipuzcoana, con sede en San Sebastián, dedicada al desarrollo de plataformas y servicios de realidad virtual enfocados a personas mayores y dependientes. Surgida en 2018, Oroi cuenta con una gran proyección en el sector y recientemente anunciaba su unión a la francesa FeelU para acelerar este crecimiento.
Está presente en más de 400 centros de día, residencias de mayores y otros recursos socioasistenciales, según el resumen de la compañía que elabora Orza.
Entre sus impulsores están los fondos locales Easo Ventures y el Grupo Mondragon, a los que ahora se unen Elkarkidetza y Geroa, han confirmado a Crónica Vasca fuentes de la compañía, que no ofrecen más datos de la operación por confidencialidad.
Hay que recordar que en febrero el fondo de las EPSV anunciaba la entrada junto a Talde, ahora propiedad de Kutxabank, en la vizcaína Siban Peosa, fabricante de bandas transportadoras industriales, lo que sitúa ya muy cerca de la treintena el número de firmas en cartera de Orza.

Ignacio Etxebarria, presidente de la federación de EPSV
El papel de las EPSV, a debate
La gestora de Elkarkidetza y Geroa es el punto de anclaje actual de las inversiones de las EPSV en el capital de empresas, que en perspectiva siguen suponiendo una parte muy minoritaria de todo el patrimonio que poseen estas entidades.
Los fondos de pensiones vascos, tras dos ejercicios de revalorización récord, acumulan según datos de la federación del sector 30.800 millones de euros de patrimonio global, de los que en torno al 1% estaría invertido en compañías del territorio.
Aumentar este porcentaje mínimo es uno de los objetivos de la modificación de la regulación de las EPSV que prepara el Gobierno de Imanol Pradales, que llegará poco después de que el anterior Ejecutivo de Urkullu ya retocara la normativa para, entre otros puntos, favorecer el rescate en forma de renta.

El lehendakari Imanol Pradales durante la presentación de la Alianza Financiera Vasca.
Así lo confirmaba recientemente el consejero de Hacienda, Noël D'anjou, que daba pocas pistas de cómo se concretará este empujón a los fondos de pensiones hacia inversiones empresariales, en todo caso siempre muy limitadas por la propia naturaleza de los ahorros para la jubilación, que fuerza a priorizar la seguridad frente a la rentabilidad.
El perfil de las inversiones de Orza es el más claro ejemplo de cómo se busca ese doble objetivo por un lado de impulsar proyectos incipientes interesantes para la economía necesitados de músculo económico para crecer y, a la vez, con garantías suficientes por su valor tecnológico como para asegurar cierto rendimiento.
Destacan en ese sentido las operaciones en el sector biosalud, hasta una decena en empresas de Euskadi y Navarra en los últimos seis años, que junto a firmas ya de cierto peso como Biolan suponen cerca de la mitad de la cartera. Burdinberri, en aeronáutica, o Satlantis, de satélites, son otras de las participadas más conocidas.