Las trabajadoras vascas cobran de media 5.790 euros menos que los hombres cada año

La diferencia entre hombres y mujeres en el mundo laboral continúa estando presente. A pesar de que esta ha disminuido considerablemente en las últimas décadas, la brecha salarial, los rangos dentro de una jerarquía o la ocupación por sectores en función de género siguen siendo una realidad.

Tener convenio es cosa de hombres: el 42% de mujeres trabaja fuera de la negociación colectiva

Y así se desprende del informe de Emakunde ‘Cifras sobre la situación de mujeres y hombres en la comunidad autónoma vasca’ que revela que, si bien en las últimas décadas las tasas de actividad y ocupación de mujeres van incrementándose, el mercado de trabajo sigue segmentado por sexo, lo que vincula históricamente a las mujeres con sectores más precarios.

Esta segmentación se da ya desde la Educación porque continúan existiendo titulaciones masculinizadas y feminizadas. En el primero de los casos, se tratan de grados del ámbito de la ciencia y la tecnología: Ingeniería Informática -con el 83,6% de hombres-, Ingeniería Electrónica Industrial y automática -con el 82,5%- e Ingeniería Mecánica -con el 81,7%-.

En el segundo de los casos, las titulaciones feminizadas, son en áreas relacionadas con la educación y el cuidado. Concretamente, tienen una presencia muy notable en Educación Infantil -un 86% de mujeres-, Enfermería -un 84,5%-, Trabajo Social -un 79,5%-, Psicología -un 79,4%, Educación Social -un 78,9%- o Medicina -un 75,6%-.

Imagen de archivo de una profesora EFE

9 de cada 10 mujeres ocupadas trabajan en el sector Servicios

Diferencia en los estudios que se traslada a la ocupación, donde existe un sector servicios ampliamente feminizado mientras que la industria y la construcción presentan un notable perfil masculinizado.

Y es que, según el estudio, 9 de cada 10 mujeres ocupadas trabajan en el sector servicios, un 20,3% en industria y solamente un 1,6% en construcción. Entre los hombres la situación es totalmente diferente. Aunque la mayoría trabaja en servicios, en torno al 58,3%, hay un 30,7% que lo hace en el sector industrial y un 9,6% en construcción.

De hecho, aunque la diferencia va disminuyendo con los años, el salario promedio de los hombres supera en 5.790 euros al de las mujeres. Además, las mujeres representan el 66% de las personas contratadas a jornada parcial y el 76% de los contratos firmados por mujeres son temporales -64% en el caso de los hombres-.

Imagen de archivo de una mujer trabajadora EFE

Poca representatividad empresarial

Los organismos vinculados a lo social y el ámbito público, son mayoritariamente donde se percibe una mayor representatividad femenina, mientras que en los espacios se encuentra una mayor representatividad masculina.

Es el caso de los consejos de administración de las compañías vascas, donde las mujeres solo representan el 30%; o el de las entidades financieras, que solo una de cada cuatro tiene a una mujer en la presidencia.

En cuanto a la participación sociopolítica, tras las últimas elecciones la presencia de mujeres en el Parlamento vasco ha aumentado ligeramente, alcanzando el 52%. Porcentaje diferente al que se presenta en alcaldías y concejalías vascas: el 34% de las alcaldías están encabezadas por mujeres y en el caso de las concejalías el 46%.