Trabajador de Michelin/Michelin España
Tambores de crisis en Michelin Vitoria: la matriz cambia sus previsiones tras el desplome de sus ventas
El gigante francés confirma sus objetivos a la baja tras la pérdida de ventas
Más información: Michelin Vitoria ya nota el impacto de la competencia asiática
La ya perenne crisis de la automoción vuelve a dejarse sentir entre los fabricantes de neumáticos. Es el caso de Michelin, que acaba de modificar sus previsiones de este año y de 2026 tras un desplome de ventas registrado en los últimos meses. Tambores de crisis, por tanto, para su planta en Vitoria, la más grande de la marca en España.
Tal y como recoge Efe, el fabricante francés de neumáticos confirmó este miércoles la bajada de sus perspectivas para el conjunto de 2025, adelantada la semana pasada, tras indicar que sus ventas cayeron un 4,4% en los nueve primeros meses del año, hasta los 19.275 millones de euros.
El descenso de la facturación se agudizó en el tercer trimestre, cuando alcanzó los 6.247 millones de euros, un 6,6 % menos, en buena medida por el hundimiento del mercado de camiones en Estados Unidos, según indicó el grupo en un comunicado.
En ese contexto, Michelin ha confirmado los objetivos a la baja ya adelantados el pasado día 13, con un resultado operativo de entre 2.600 y 3.000 millones de euros, frente a los 3.400 millones que esperaba obtener anteriormente.
En paralelo, Michelin -que en Vitoria tiene una planta con 3.400 operarios- ha indicado este miércoles que renuncia también a sus previsiones para 2026, cuando esperaba obtener más de 4.200 millones de euros de resultado operativo y un margen del 14%.
Todos estos datos se conocen, además, cuando en la planta vitoriana algunos trabajadores aseguran temer ajustes venideros. "Con la que está cayendo en la automoción europea por el impacto de China, lo que está pasando sólo nos puede afectar negativamente", sostienen. "Es pronto para saber qué pasará, pero no tiene buena pinta", agregan.
Cabe recordar que en este 2025 el principal conflicto laboral se ha vivido en la planta de Bridgestone en Basauri, con un ERE traumático para varios cientos de trabajadores. Malos tiempos, parece, para los fabricantes de neumáticos.