Imanol Pradales en una visita a Vidrala, empresa que podría ser consumidora de hidrógeno a través de un nuevo hidroducto desde Petronor / Irekia

Imanol Pradales en una visita a Vidrala, empresa que podría ser consumidora de hidrógeno a través de un nuevo hidroducto desde Petronor / Irekia

Empresas

Pradales bendice el plan de hidrógeno de Enagás: un tubo de 160 kilómetros cruzará 38 pueblos vascos

Euskadi será punto de salida hacia Europa dentro de la red que proyecta la compañía española como base de la infraestructura de hidrógeno a partir de 2030

Enagás estudia varios trazados para su 'autopista' de hidrógeno por Euskadi

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Enagás trae este lunes a Euskadi su 'road show' para dar a conocer la red troncal de hidrógeno. Es la base que sostendrá el futuro ecosistema en torno al hidrógeno verde a partir de la próxima década, un complejo de tuberías que vertebra la península ibérica y en el que el País Vasco es palanca en el viaje de salida de este gas hacia Europa.

Sin red eléctrica no hay electricidad y sin hidroductos no hay hidrógeno. Esta es una vía de descarbonización a la que el anterior gobierno de Iñigo Urkullu intentó dar un impulso pero lo cierto es que los avances reales sobre el terreno son mucho más lentos de lo esperado.

El hidrógeno es aun demasiado caro de producir y de transportar y almacenar, motivo por el que al sector privado le está costando dar pasos más allá de los grandes programas con subvenciones públicas. En Euskadi hay decenas de proyectos de investigación, sobre todo alrededor de los centros tecnológicos, pero las empresas siguen sin lanzarse a tratar de hacer orbitar esos avances en el mercado.

El proyecto estrella es el que encabeza Petronor, que prevé poner en funcionamiento un gran electrolizador en 2028 tanto para consumo interno en los procesos de la propia refinería como para vender el excedente a la industria. Esta segunda parte es, a día de hoy, casi ciencia ficción.

Trazado del nuevo hidroducto de Enagás por Euskadi, desde Arrigorriaga hasta Haro

Trazado del nuevo hidroducto de Enagás por Euskadi, desde Arrigorriaga hasta Haro

Respaldo político

En este contexto de inmadurez de la tecnología y la infraestructura es significativo que la presentación del tramo vasco de la red de transporte de Enagás cuente con la plana mayor del Ejecutivo de Imanol Pradales, incluso está prevista la presencia del propio lehendakari.

La puesta de largo se hará en el Puerto de Bilbao, punto de anclaje del electrolizador anterior al de 100 MW de Petronor, en este caso de 10 MW, que estará operativo el año que viene para ayudar a la fabricación de combustible sintético. El puerto vizcaíno ha firmado acuerdos de intenciones con varios gobiernos portuarios del centro de Europa para estudiar una posible exportación de hidrógeno desde Bilbao.

Electrolizador de 2,5 MW, el más pequeño, de la refinería de Petronor en Muskiz

Electrolizador de 2,5 MW, el más pequeño, de la refinería de Petronor en Muskiz Petronor

El entorno de Petronor y el Puerto de Bilbao serán así parada crucial en el nuevo hidroducto principal, una especie de autopista de hidrógeno, que atravesará Euskadi desde el oeste, procedente de Cantabria, hasta el sur de Álava, con salida en este caso en Haro, pasando por Gipuzkoa a la altura de Mondragon.

Enagás pretende aprovechar los actuales trazados para el suministro del gas natural para construir ese nuevo tubo. Se han estudiado diversas alternativas en algunos puntos para dar con la confección actual sobre plano que se ha trasladado a las instituciones y de la que este mismo lunes se darán más detalles.

Petronor será el principal motor de hidrógeno verde de Euskadi a partir de 2028

Petronor será el principal motor de hidrógeno verde de Euskadi a partir de 2028

De Muskiz a Labastida

Según la documentación presentada al Gobierno central, el País Vasco está afectado por dos tramos de esta red troncal, el que va de Reocín a Arrigorriaga y el que une este municipio vizcaíno con Haro.

En total son 163 kilómetros de hidroducto, de los que en torno a la mitad corresponden a Bizkaia por algo más de 50 y de 30 en Álava y Gipuzkoa, respectivamente.

Tal y como se recoge en el borrador del proyecto, el conducto atravesará algo más de una veintena de municipios vizcaínos, partiendo de Muskiz, donde se ubica Petronor, discurriendo por la margen izquierda de Bilbao para abandonar la provincia a la altura de Durango.

Tras atravesar el sur de Gipuzkoa el hidroducto entra por el norte de Álava, atraviesa Treviño y sale por el sur para conectar con La Rioja por Haro. En total, están afectados 38 términos municipales del País Vasco, según el proyecto, de los que la mayoría son vizcaínos, 9 alaveses y 7 guipuzcoanos.

Tramo cántabro del tubo de hidrógeno de Enagás, con parte discurriendo por la margen izquierda de Bilbao y parada en Petronor

Tramo cántabro del tubo de hidrógeno de Enagás, con parte discurriendo por la margen izquierda de Bilbao y parada en Petronor

El tronco de la nueva red 

Este gran tubo será el punto de arranque de un despliegue posterior de la red a través de otros circuitos, algunas de cuyas ramas ya están proyectadas a fin de asegurar el suministro de hidrógeno a zonas industriales. Hay ya estudios abiertos por parte de Nortegas y del propio Gobierno vasco a través del EVE para desarrollar estos brazos más finos que partirán de la vía central de Enagás.

Hay que recordar que Enagás y el EVE son socios en otros proyectos como Bahía Bizkaia Gas (BBG) y de hecho la empresa pública vasca tiene un 10% en una sociedad de transporte de gas de la propia Enagás que se conservó cuando esta compró a EDP la red de gasoductos del norte (Naturgas Energía Transporte).

Al igual que en Cantabria, hay proyectado además en Euskadi un almacén de hidrógeno en cavidades salinas a fin de poder generar reservas en picos de producción para poder enviar el gas a otras comunidades incluso a Europa a través del H2Med.