El plato típico en otoño. Adobe Stock
El plato típico de Euskadi en otoño que no se come en el resto de España: un manjar por menos de 5 euros fácil, nutritivo y saludable
Esta sabrosa receta es de origen humilde, pues se elaboraba con los alimentos que las familias cultivaban en los huertos y puede elaborarse en la actualidad por menos de cinco euros.
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Con el fin del calor a la vuelta de la esquina y el frío llamando a la puerta, el otoño es una de las estaciones más deseadas de los vascos no solo por las equilibradas temperaturas, sino porque se pueden deleitar los paladares con una gastronomía deliciosa.
Una época en la que alcanzan la mesa alimentos de temporada como las populares alubias de Tolosa, los perretxikos, el bacalao o la calabaza, los protagonistas de unos platos sencillos llenos de sabor y tradición. Más allá de estos manjares existe un plato que nunca deja la mesa en esta estación del año: la porrusalda.
La porrusalda, un manjar
La porrusalda deriva de puerro (porru) y caldo (salda). Esta sabrosa receta es de origen humilde, pues se elaboraba con los alimentos que las familias cultivaban en los huertos y puede elaborarse en la actualidad por menos de cinco euros. Solo se necesitan los ingredientes base, como patatas y puerros. Todo lo demás, zanahoria, calabaza o pescado, son añadidos.
Las patatas y los puerros constituyen un plato completo que se ha llegado a expandir por otras regiones del norte. Es sencillo, sabroso y barato, pero también depurativo y muy sano.
Aporta, según el artículo Porrusalda, tradicional y revitalizante plato de cuchara de Gastronosfera, 26 calorías, un 50% de vitamina C, un 17% de vitamina E, el 14% de vitamina B6, el 14% de selenio, el 11% de calcio y el 9% de hierro. Un alimento ideal para todas las edades.
Decenas de hogares vascos se decantaban por la porrusalda antaño por la facilidad de encontrar los ingredientes para prepararlo y por ser nutritivo y perfecto para combatir el frío. De ahí que se consumiera más de una vez a la semana.
Durante la posguerra, además, fue un gran recurso. "Todavía se puede escuchar a personas que tienen ligada su infancia al olor y al sabor de la porrusalda con la que combatían el hambre".
El cocinero vasco Karlos Arguiñano ofrece una receta para elaborar una porrusalda o 'sopa de puerro' impresionante, con un toque especial y diferente en el caldo, en su canal de cocina de Antena 3, Cocina Abierta.
Esta sopa tradicional caracterizada por "su sencillez y reconfortante sabor" lleva muy pocos ingredientes, como zanahorias, patatas, puerros, cebolla, esqueletos de pollo, aceite, sal, agua y perejil.
En el artículo Porrusalda de Karlos Arguiñano, el plato de cuchara perfecto del canal de cocina mencionado, Arguiñano explica que el primer paso a la hora de preparar la porrusalda es el de introducir los esqueletos de pollo en la olla rápida con agua. A continuación añadimos perejil y un poco de sal. Ponemos la tapa y dejamos que se cocine todo al 1 unos minutos.
Acto seguido sacamos el caldo del fuego y dejamos reposar. Es importante desgrasarlo y colarlo con la ayuda de un colador con el objetivo de que los restos de hueso y perejil no acaben en nuestra porrusalda. Reservamos todo y en otra cazuela introducimos la cebolla picada y sofreímos a fuego medio sin que llegue a dorarse.
Después limpiamos los puerros y los cortamos en rodajas. Lo mismo hacemos con las zanahorias. Añadimos todo a la cazuela junto con la cebolla. Es el turno de las patatas. Las pelamos y las cortamos chascándolas para que suelten almidón y dejen el caldo más gordito y rico. Las incorporamos a la cazuela.
El caldo de pollo lo vertimos sobre las verduras y añadimos sal. Lo llevamos a ebullición. Bajamos el fuego y cocinamos casi media hora a fuego lento. Y ya tenemos un maravilloso plato que lleva ganándose el corazón de los vascos desde hace años. Un truco para quienes deseen una porrusalda más espesa: hay que cocinarla unos cuantos minutos más para que el caldo se reduzca