Este miércoles se celebra el Día Europeo por la Igualdad Salarial y con motivo de la fecha, Emakunde ha querido recordar que la brecha salarial entre hombres y mujeres sigue presente aunque se haya acortado en seis puntos en los últimos cuatro años. La brecha en Euskadi se sitúa en el 17,9%, lo que se traduce en que un hombre cobra de media 5.914 euros más al año que una mujer. 

La directora de Emakunde, Miren Elgarresta, ha señalado que este "es un problema complejo, de carácter estructural y multidimensional y en su abordaje deben participar todos los agentes y ámbitos implicados".

Entre los retos para acabar con la brecha salarial, Emakunde ha recalcado la importancia de "reducir" la llamada segregación ocupacional, ya que es la segregación ocupacional por sexo, "el factor que más incide en la brecha salarial, hasta un 35%". También hacen especial hincapié en "profundizar en una educación desde la igualdad y para la igualdad, para ir superando los roles y estereotipos; favorecer la corresponsabilidad social; y democratizar los cuidados procurando un nuevo equilibrio del cuidado institucional, personal y familiar, reforzando el primero".

Con motivo de este día, se ha inaugurado además en Vitoria la jornada "El papel de la Inspección de Trabajo en la igualdad retributiva". La vicelehendakari segunda y consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, ha aprovechado el acto para anunciar que propondrá a los agentes sociales e institucionales que el 8 de marzo de 2024 sea una de las fiestas laborables. 

Esta propuesta se trata, ha señalado Mendia, "de un paso más en los esfuerzos de sensibilización para acotar todas las formas de desigualdad, y muy especialmente la brecha salarial". En este sentido, refiriéndose a la bajada de seis puntos en cuatro años, la vicelehendakari ha asegurado que se debe, entre otros factores, a la subida del Salario Mínimo Interprofesional un 46% en los últimos cinco años, y la extensión de los planes de igualdad, las auditorías y los registros salariales.

Inspección de Trabajo, "una aliada" para reducir la brecha salarial

La consejera de Trabajo ha defendido que la Inspección de Trabajo "es la herramienta para vigilar el cumplimiento de los derechos y de las normas laborales, y muy específicamente las que puedan, aunque sea de forma indirecta, discriminar por razón de género" y ha asegurado que "es una aliada en esta causa de Igualdad". 

"Cuando las normas no se cumplen, cuentan con la Inspección, y mi Departamento va a reforzar este servicio público puesto a su disposición, a disposición de la igualdad", ha insistido.

Nuevas estrategias

Para revertir la situación, desde el Departamento se van a diseñar nuevas estrategias, entre ellas, una estrategia de inclusión de hombres en sectores feminizados, una cuestión que será abordada con detenimiento en el II Congreso Vasco de Brecha Salarial que tendrá lugar en junio y que se organiza en cooperación con la Organización de Estados Iberoamericanos.

También pretenden elaborar un trabajo sobre hombres en sectores feminizados para diseñar una estrategia nueva que permita "articular políticas públicas" que hagan que en un futuro próximo que se deje de hablar de sectores masculinizados o feminizados y se hable de igualdad de oportunidades y condiciones laborales".

Todo ello unido a los programas que ya se llevan a cabo para incentivar la contratación de mujeres en sectores masculinizados y mejor pagados, como es el de la construcción, un sector en el que solo trabajan un 8% de mujeres.