Inteligencia artificial del bien y del mal
Hace muchos años, aunque el tango diga que 20 años no son nada, un nuevo primo vino a completar una familia llena de amor y que con los brazos abiertos ansiaba su inesperada irrupción la parentela. Vino, como se suele decir, por sorpresa de esas que al principio dejan a los padres aturdidos y al resto de los familiares con el reiterado ánimo de repetir que los niños siempre vienen con un pan debajo del brazo. ¡Qué equivocados estábamos!
Tres kilos y cincuenta centímetros de felicidad absoluta se transformaron en veinticuatro horas en el más terrible de los dolores. Había problemas, los médicos empezaron con las pruebas para llegar al diagnóstico que no llegó. Si las puertas del submundo se abrían bajo los pies de sus padres, el peregrinaje del no saber qué le sucedía es el purgatorio más duro que se puede sufrir en tal situación. Siete meses más tarde llegó el desastre, la despedida, el antinatural adiós a un hijo que se iba sin siquiera saber por qué, sin el mínimo acunante motivo de su enfermedad y su inevitable final.
Recientemente una noticia me llamaba la atención. La inteligencia artificial había conseguido diagnosticar la enfermedad de un niño que ninguno de los diecisiete médicos que asistieron al menor había conseguido descifrar. Ante la desesperación de los padres y de los propios facultativos, uno de ellos intuyó con acierto, que el ChatGPT podía ser de gran ayuda. Así fue, médula anclada dictaminó la I.A. confirmado después por el personal médico que no había podido encontrar el raro padecimiento del pequeño hasta ese momento. Inevitable pensar ¿qué hubiera pasado si hace veinte años hubiéramos contado con esta herramienta?
Creo que la inteligencia artificial puede ser a la historia de la humanidad el equivalente al descubrimiento de la luz eléctrica o la máquina de vapor. La revolución de un mundo que será diferente gracias a una instrumento que desborda cualquier previsión que podamos hacer hoy en día. Una tecnología que aún está en mantillas, pero que hará del mundo de nuestro hijos e hijas algo que nos va a costar reconocer. Lo que desconocemos es si para mal o para bien y es que, como cualquier utensilio, se puede usar en ambas direcciones.
La revolución de un mundo que será diferente gracias a una instrumento que desborda cualquier previsión que podamos hacer hoy en día
Vayámonos hasta Extremadura, concretamente a Almendralejo, una población de unos 30.000 habitantes donde se conocen todos. Como la pólvora, entre los whastapps de los alumnos de cuatro centros educativos de la localidad, han rulado las fotografías de una veintena de menores desnudas de entre once y diecisiete años. Menores a las que se les ha hurtado su cara y a través de la inteligencia artificial se han generado desnudos muy realistas, indistinguibles verdad o mentira. Sus compañeros, también menores de edad, decidieron ejercer presión y coaccionarles creando y difundiendo estas fotografías. Acordaron cometer un delito muy grave que ya investiga la Fiscalía de menores. ¿Sabía lo que hacían? Y si es así ¿por qué decidieron que sus compañeras merecían ser acosadas?
Gracias a las madres de las chicas afectadas que han dado la voz de alarma en redes, en los medios y en la justicia se investiga el caso que está pasando una factura emocional grande a unas chicas que tiene que defenderse de una gran mentira, de una amenaza 2.0 aunque el bulling machista sea el de siempre. Educación, educación y educación es el gran deber de una sociedad que ha renunciado a la formación afectivo sexual para delegarla en los contenidos de internet.
Educación, educación y educación es el gran deber de una sociedad que ha renunciado a la formación afectivo sexual para delegarla en los contenidos de internet
Si no han recibido uno de los múltiples memes en el que se dobla a políticos y famosos en diferentes idiomas es que no viven es este planeta. X, el antiguo Twitter se ha llenado de Rajoy hablando en inglés, Belén Esteban anunciando sus productos en italiano, etc... Nadie se ha podido resistir a probar el poder de HeyGen, una herramienta de I.A. capaz de doblar cualquier vídeo a numerosos idiomas. Además, imita la voz real y trata de encajarla con el movimiento de la boca del interlocutor, asegurando la carcajada y la sonrisa de quien lo ve.
Menos gracias le ha hecho al actor Stephen Fray que le robaran su voz a través de inteligencia artificial para doblar un documental sin su consentimiento y, desde luego, sin ninguna transacción monetaria mediante. Fray ha confesado que su voz fue sustraída de los videolibros de Harry Potter para los que sí trabajo y de ahí la I.A. hizo el resto. Son los primeros casos de suplantación de identidad que se hacen públicos por la dimensión de sus protagonistas, pero esto solo es el principio. De hecho, los actores e Hollywood que están en huelga reivindican estar protegidos ante el reemplazo de actores, actrices y guionistas por esta nueva tecnología.
Son los primeros casos de suplantación de identidad que se hacen públicos por la dimensión de sus protagonistas, pero esto solo es el principio
En la Unión Europea trabajan de la mano tanto el Consejo como la Comisión en la primera regulación integral a nivel mundial que verá la luz a final de año. Una normativa que va dirigida a identificar mediante marca de agua o cualquier otro distintivo aquellos contenidos creados por I.A. Enfocada principalmente a grandes empresas tecnológicas o corporaciones, sin embargo, queda en el aire cómo se va a poder controlar el uso privado, a nivel usuario, más allá de establecer sanciones ¿cómo se podrá evitar? Demasiada agua en un vaso que ya rebosa.